Otra de las novedades de las que hemos podido disfrutar en el Salón del Automóvil de Ginebra es el nuevo prototipo eléctrico y descapotado de Bentley, el EXP 12 Speed 6e, una reinterpretación del ya conocido deportivo conceptual biplaza de altas prestaciones EXP 10 Speed 6 que conocimos el pasado año. Una vez más, este luce una combinación del más moderno diseño automovilístico, la artesanía británica de la mayor calidad, los mejores materiales y la más avanzada tecnología orientada a las prestaciones.
Exteriormente este prototipo cuenta con unas líneas robustas y atléticas a cielo abierto, inspiradas en las formas aerodinámicas de los fuselajes y las alas de las aeronaves. El objetivo del diseño era desarrollar interpretaciones contemporáneas del diseño que caracteriza a Bentley, combinando belleza y precisión. El resultado es un cupé de superficies despejadas y modernas pero dotado de los inconfundibles rasgos de un Bentley.
Esta combinación de ideas contemporáneas y de elementos clásicos se hace palpable en varias zonas de la carrocería, como, por ejemplo, la nueva interpretación en 3D de la rejilla matricial de Bentley con el 6e iluminado y los cuatro faros delanteros redondos. Todos los materiales del exterior y cada detalle individual se han diseñado según el prisma del diseño moderno de la firma británica, con elementos que llaman nuestra atención como las cámaras que sustituyen a los retrovisores o las llantas bitono de cinco radios dobles.
La vanguardista tecnología de impresión tridimensional en metal ha permitido crear con precisión de diseño a microescala la rejilla de malla, los escapes, los tiradores de las puertas y las tomas de aire laterales. Como os comentadba, la emblemática rejilla de malla de Bentley, por ejemplo, ha dejado de ser una simple cuadrícula plana para incorporar profundidad variable en una compleja geometría tridimensional solo visible al contemplarla en un ángulo oblicuo.
El diseño del interior, por su parte, gira en torno a una línea continua que discurre alrededor del habitáculo, que atraviesa la consola y se convierte en dos alas simétricas antes de adentrarse en la puerta y regresar al reposabrazos de la consola. En esa consola central se sitúa una pantalla de 12 pulgadas y los controles de los sistemas de conducción. A ambos lados están los asientos deportivos, altamente acolchados. Pero sin lugar a dudas destaca su volante cortado en la parte superior, con dos botones en los extremos: uno para obtener las máxima prestaciones y el otro para limitar la velocidad.
Respecto al tren motriz, la marca no ha dado detalles acerca de su sistema de propulsión eléctrico, pero sí sabemos que contará con un enchufe convencional tras la matrícula posterior y con un sistema de carga rápida por inducción, todo ello rematado por una elevada autonomía para obtener un feedback de los clientes acerca de un posible lanzamiento de versiones híbridas enchufables y eléctricas.