Seguramente, si vuestra compañía aseguradora os comentase una nueva modalidad de seguro en la que se instala un pequeño dispositivo en tu moto o coche que sirve para ubicarte geográficamente, muchos de vosotros diríais que no, que seguramente es para espiar vuestra posición y vuestra forma de conducir. Dejando a un lado estas posibilidades, lo cierto es que estas pequeñas cajas negras y localizadores no son un peligro para nuestra intimidad, y por supuesto tenerla puede significar la diferencia entre la vida y la muerte según el caso por lo que si os lo ofrecen, en muchos casos estaréis más seguros.
No nos pueden espiar, al menos por regla general: la ley está de nuestra parte, como particulares, gracias a la LOPD. Además, solo hay que pensar en las necesidades absurdamente grandes de almacenamiento para mantener todos nuestros datos, y las cantidades ingentes de tiempo y dinero que hay que dedicar para monitorizar nuestra actividad día a día. Y todo para tener la pequeña posibilidad de cazarnos en una infracción que no pueden usar (por la manida LOPD), y que no va a compensar el gasto en espionaje. Es desde cualquier punto de vista, absurdo espiar “a cualquiera”, entendiéndose por cualquiera un ciudadano de los que a algunos gusta llamar “anónimos”.
Entra dentro de lo posible limitar características del vehículo como potencia o velocidad máxima, para casos de conductores noveles, o conductores con riesgos puntuales, e incluso para conductores con infracciones pendientes o con pocos puntos del carnet. Esto es algo que limita su libertad, pero garantiza hasta cierto punto nuestra seguridad, algo que muchas personas valoran especialmente. Y no me refiero a la seguridad, que lógicamente también, sino a la posibilidad de tener controlados a ciertos elementos en la carretera.
Encontrar un vehículo robado si lleva uno de estos dispositivos es fácil. No solo está la posibilidad de rastrear el localizador, sino que, incluso si los ladrones consiguen inutilizar la caja en algún momento, las pistas registradas acerca de la última posición registrada podrían ayudar a estrechar el cerco sobre los ladrones. En resumen, si el vehículo es capaz de decir dónde está, o dónde estuvo hace 20 minutos, es más fácil de localizar. Incluso los más fantasiosos podemos pensar en medidas de seguridad como, por ejemplo, que el intento de desactivación de una caja lance una señal de socorro directamente a las fuerzas de seguridad. Al fin y al cabo, hablamos de software y hardware. Además, dispositivos como Detector OnBike de AXA tienen la capacidad de avisarnos en caso de que nuestra moto sufra algún movimiento indeseado cuando está aparcada en la vía.
Si tenemos un accidente grave en carretera, los servicios sanitarios pueden encontrarnos fácilmente sin que tengamos que hacer nada, aunque estemos inconscientes gracias a su sistema E-Call. Esta es quizás de las ventajas más decisivas que podemos encontrar en uno de estos dispositivos: el tema de la supervivencia en los minutos de oro tras un accidente.
Este sistema registra datos y puede interpretarlos en tiempo real y determinar si nos hemos salido de la vía, y la violencia con la que lo ha hecho. Sabiendo eso, de inmediato es capaz de lanzar una llamada de socorro con datos de geolocalización. Y eso, ni es ciencia ficción, ni es algo negativo, sino todo lo contrario.
¿Cuestan mucho estos dispositivos?. Bueno, en particular, el que os hemos comentamos tiene un coste de 149 euros y la cuota de mantenimiento es de 9 euros al mes, sin embargo, dependiendo de los seguros es posible obtenerlo de forma gratuita. Teniendo cualquier moto puedes conseguir Detector OnBike -siempre y cuando asegures tu moto en AXA antes del 31 de Julio-, sin embargo, si quieres que te salga totalmente gratis la cuota de los 3 primeros meses necesitas tener una moto Nacked, Custom, Trial o Turismo.
Vosotros, ¿dónde os posicionaríais con el tema de estos dispositivos?
No creo q a mi aseguradora le guste mucho mis velocidades jajajaja
debería ser opcional, con un solo pago y un mantenimiento anual no muy desorbitado. En mi opinión me parece esencial para aquellos que no ocultan nada.