La gama MINI Hatch de tres y cinco puertas, y el Cabriolet acaban de actualizarse recibiendo pequeños cambios estéticos y de equipamiento, y conservando los motores conocidos aunque eso sí, con ligeras mejoras para reducir los consumos según indica BMW en la nota de prensa.
Exteriormente lo más llamativo son los pilotos traseros con el dibujo de la bandera británica (Union Jack) y los faros delanteros LED matriciales que son capaces de modificar el foco de luz para no deslumbrar al resto de conductores. Colores, llantas de aleación y otros pequeños detalles también han sido objeto de revisión.
En el interior aparecen nuevos sistemas multimedia con pantalla táctil y compatibles con Apple CarPlay. También estrena una instrumentación ligeramente diferenciada y la marca dice que hay un nuevo volante aunque realmente no encontramos diferencias estéticas (puede cambiar el grosor, algo que no hemos podido comprobar).
Entre las novedades de equipamiento hay que señalar la bandeja inferior con cargador sin cables para móviles, paneles decorativos específicos y una pequeña revisión de los materiales/ajustes para aumentar la sensación de calidad percibida. Además el selector de modos de conducción ahora se ubica junto al resto de botones y no bajo la palanca de cambios.
En cuanto a los motores, la familia cuenta con los 1.5 Turbo de 75, 102 y 140 CV que se usan en los One First, One y Cooper, además del 2.0 Turbo de cuatro cilindros con 192 CV para el Cooper S. En diésel se pueden comprar los 1.5d con 95 CV y 116 CV de los OneD y CooperD, y el 2.0d con 170 CV para el Cooper SD. Salvo este último, todos pueden incluir la nueva caja de doble embrague con siete velocidades, dejando la automática de ocho para el SD.
Los interesados en el nuevo MINI 2018 podrán disfrutarlo a partir del próximo mes de abril aunque un poco antes se abrirá la recepción de pedidos. Los precios para el mercado español los conoceremos en unas semanas.