Un coche divertido, que parece de juguete y no tiene marcha atrás, así es este Peel Trident que ahora RM Sotheby´s ha puesto a subasta. Desde fuera parece algo así como una pequeña nave espacial de juegue, y gracias a esa burbuja de plástico que conforma su carrocería podremos obtener un buen bronceado en verano sin movernos del volante, aunque puede que acabemos más acalorados de lo normal. Cuando vayamos a aparcar será necesario bajarnos para darle un pequeño empujón, es lo único malo de no tener marcha atrás.
Sus diminutas dimensiones le han llevado hasta el libro Guinness de los Récords, por ser el coche de producción más pequeño que se ha fabricado nunca. Se anunciaba en los medios como «casi más barato que caminar» y es que su tamaño hace que sus consumos sean realmente bajos, una media de 2,8 l/100 km. El Peel Trident añadió al modelo anterior un nuevo diseño de su carrocería destacando su cúpula de plástico transparente.
En teoría tiene espacio para dos ocupantes, pero al realidad es muy diferente ya que en la práctica solo cabe el conductor. Pero sin duda lo más característico del Peel Trident es su caja de cambios de 3 velocidades y sin marcha atrás que nos obligará a salir del vehículo cada vez que queramos aparcar y jugar al Tetris con nuestro pequeño para estacionarlo correctamente. El que ha salido a subasta tiene el chasis E185 que fue montado en 1965 para ser entregado en Reino Unido a su propietario.
Más tarde acabaría pasando a las manos de dueño actual en el 2014 que lo compró tras una completa restauración. Actualmente se encuentra en los Estados Unidos hasta que se celebre la subasta de RM Sotheby’s en Monterey (California) el 18 y 19 de agosto.
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Miguel Ángel Ibáñez Fernández