Desde luego no es la primera vez que hablamos de carreteras inteligentes enfocadas a hacer más fácil nuestra vida. En su día ya os hablamos de carreteras fabricadas de plástico para reducir costes, de pavimentos capaces de regenerarse de manera autónoma, de autopistas que recargan la batería de los coches eléctricos en movimiento e incluso de carreteras capaces de absorber la luz solar para reutilizar dicha energía.
Hoy, la noticia es algo distinta y nos llega desde China, donde se está gestando un ambicioso plan para construir una red de autopistas inteligentes pensadas para recoger energía solar y con ello recargar vehículos eléctricos por inducción. Al fin y al cabo estos son el futuro y la mayoría de países debería ponerse manos a la obra para adaptarse al cambio y que no ocurra como en la actualidad, donde tener un eléctrico es una aventura por la escasez de estaciones de recarga.
Aunque en Corea del Sur tuvieron una idea similar y el proyecto ya está en marcha, no será hasta 2020 cuando se vean los primeros resultados. En este caso, por el contrario, ya podemos hablar de un primer tramo de dos kilómetros casi operativo en la autopista la Jinan City Expressway, situada en la ciudad de Jinan (China). No es la primera carretera solar que existe, pues incluso en Francia hay una, pero sí que es la primera de ellas capaz de recargar los vehículos que circulan por encima a través de la inducción magnética.
Por el momento, la carretera no se ha conectado a la red eléctrica, pero se hará a principios de 2018, junto a la instalación de unas baterías para almacenar la energía generada.
Tal y como declara la empresa responsable del proyecto, Quilu Transportation Development Group, el primer tramo ya está construido y una vez se conecta a la red eléctrica será totalmente operativo. Para su construcción se ha utilizado por primera vez «hormigón transparente», el cual posee prácticamente las mismas propiedades estructurales que el asfalto convencional. Cuenta con una estructura tricapa: en la parte superior, que deja pasar la luz, está dicho hormigón; debajo los paneles solares y los paneles de carga inalámbrica; y en una última capa el cableado y la protección contra la tierra húmeda.
Al parecer, esta superficie es capaz de soportar el peso de un camión de tamaño medio, lo que supone una limitación a la hora de usarlo de forma extensiva en las autopistas del país. Por ahora, se desconocen los detalles técnicos del conjunto de paneles instalados en la carretera (marca, capacidad, uso de la energía…), pero sí que sabemos que serán capaces de recoger energía, almacenarla y recargar los coches eléctricos por inducción magnética incluso estando en movimiento.
Para ello, eso sí, primero tenemos que ver esta tecnología instalada en los coches… Además, es preciso señalar que también cuentan con una función para calentar la superficie a fin de derretir la nieve y el hielo que se forma en invierno.
Y mientras tanto en españa prohiben todo