El tramo final en el camino hacia el «Salón de la Fama» de modelos de BMW se produce nada menos que seis años después del lanzamiento al mercado del BMW i8 y justo ahora, tras la pura declaración de intenciones del BMW i8 Coupé y el BMW i8 Roadster hemos sabido que el modelo cesará su producción el próximo mes de Abril.
Como ya sabrás, el BMW i8 comenzó su historia de éxito mundial como una simbiosis única de diseño futurista y tecnología pionera. El primer modelo híbrido enchufable de BMW Group llegaba con un sistema híbrido enchufable en el que el rey era un motor tricilíndrico de gasolina de última generación que en su momento, levantó alguna que otra ampolla.
El BMW i8 se convirtió en el deportivo más exitoso del mundo con un sistema de transmisión electrificado. Con más de 20.000 unidades vendidas desde 2014, el deportivo de 2 + 2 plazas con puertas de ala de gaviota se ha convertido por sí solo en un icono que muy probablemente, será un buen objeto de colección en el futuro.
El BMW i8 aúna materiales innovadores como termoplástico ultraligero, plástico reforzado con fibra de carbono (CFRP), aluminio y magnesio con un tren motriz complejo que combina tecnología de motor eléctrico y de combustión. Más concretamente, el deportivo híbrido-enchufable se fabrica en la fábrica de Leipzig (Alemania).
La potencia del sistema -tanto en el BMW i8 Coupé como en el Roadster-, con el motor eléctrico y el motor de combustión actuando a la vez, es de 275 kW (374 CV). Aceleran de 0 a 100 km/h en 4,4 / 4,6 segundos y tienen una velocidad máxima limitada de forma electrónica de 250 km/h. La autonomía eléctrica es de 55 y 53 km en el ciclo NEDC, respectivamente.
Una lástima tener que decirle adiós, pero seguramente, BMW nos tenga preparadas cosas mucho mejores.