Hace unos años, Volvo nos la intentó colar un «April Fools Day» con una historia o broma que hablaba sobre la implementación de airbags fuera del vehículo. Hoy, años más tarde, el fabricante ZF ha mostrado al mundo su último invento, unos airbags exteriores que pretenden montarse en los primeros vehículos en un plazo máximo de dos años.
Ya no son prototipos, puede iniciarse su venta y montaje en nuevos modelos en cuanto un fabricante muestre su interés por ellos y aunque pueda parecer una tontería, la cosa pinta bien. El fabricante alemán ha tardado nada menos que 10 años en completar el desarrollo de estos Airbags capaces de desplegarse en 100 milisegundos y proteger la integridad de otros usuarios vulnerables de la vía, como por ejemplo motoristas.
No, estos Airbags no están diseñados para proteger tu preciosa carrocería sino minimizar o amortiguar el impacto de la misma contra objetos o usuarios más vulnerables.
Escondidas en los faldones laterales, estas bolsas de aire inteligentes están asociadas a un sistema de sensores de monitorización capaces de percibir todo lo que sucede alrededor del coche. Si determinan que un choque va a producirse de forma inminente, estos se despliegan.
Las pruebas realizadas por ZF revelan que sus bolsas de aire exteriores reducen los riesgos de intrusiones en la cabina hasta en un 30% y reducen los niveles de lesiones entre un 20 y un 30%.
La solución de ZF está cargada de tecnología. Junto con el airbag en sí, la compañía ha desarrollado un conjunto de sensores de radar, cámaras y sensores LiDAR que determinan cuándo se debe activar el sistema. Con vistas a que el sistema triunfe, en ZF han pensado en todo y para reducir costes permiten que los sensores que se emplean para este sistema puedan ser los mismos o sirvan como base para otros sistemas de asistencia a la conducción como por ejemplo la advertencia de cambio de carril o el sistema de mantenimiento de carril.
ZF vía Carscoops