Hubo una época en la que Ferrari no era más que el nombre de su creador, lo que convertía a Alfa Romeo en el referente de los automóviles italianos. Más concretamente, en 1930, la familia de modelos 8C fue el pináculo de la compañía, tanto en sus versiones de competición como de carretera. Y si hay algo que todos ellos tenían en común era el motor de ocho cilindros en línea y una hermosa carrocería desarrollada por los mejores carroceros de Italia.
Con tanta exclusividad e historia a sus espaldas, no es de extrañar que haya sido un Alfa Romeo 8C 2900B Touring Berlinetta de 1937 el ganador del Pebble Beach Concours d’Elegance, el evento final de la Semana del Automóvil de Monterey y uno de los concursos de elegancia más importantes del mundo. Sólo vieron la luz cinco unidades y se consideran una de las creaciones más elegantes de Carrozzeria Touring.
El Touring Berlinetta fue el Alfa Romeo 8C tecnológicamente más avanzado que existió. Esta unidad en concreto se ha sometido a un profundo proceso de restauración y Pebble Beach ha sido su primera aparición pública tras el laborioso trabajo, cuyos excelentes resultados saltan a la vista. Lo curioso es que ya había ganado en el pasado algunos premios en Pebble Beach, como el Most Elegant Closed Car en 2001.
Los ganadores del premio ‘Best of Show’ de Pebble Beach reciben el trofeo y un reloj Rolex.
Ahora, sus propietarios -David y Ginny Sydorick, de Beverly Hills- han devuelto el coche a sus especificaciones originales del Salón del Automóvil de Berlín de 1938, pues recordemos que este modelo fue inicialmente presentado en el Salón del Automóvil de París de 1937, y luego en los shows de Milán y Berlín en el ’37 y el ’38.
Se cree que el automóvil vivió en Alemania hasta 1956, cuando se importó a los Estados Unidos. Posteriormente, fue restaurado en la década de 1990, época en la que consiguió su primera victoria en Pebble Beach. Sin embargo, su última restauración ha elevado el estándar considerablemente, de ahí que haya logrado el premio Best of Show.