Al igual que muchos otros fabricantes de automóviles, Mercedes-AMG ha utilizado durante años el mítico trazado de Nürburgring Nordschlife para poner a punto su modelos más prestacionales. Igualmente, el circuito alemán ha sido el escenario elegido por los chicos de Affalterbach -entre otros- para demostrar al mundo lo rápidos que pueden llegar a ser sus modelos, como ya vimos en su día con el Mercedes-AMG GT R que completó los 20.8 km de longitud total y las 73 curvas del ‘Ring’ en apenas 7:10.92.
Sin embargo, la división de alto rendimiento de Mercedes-Benz ahora tiene un nuevo centro de pruebas donde poner a punto sus suculentos deportivos sin ser cazados por los fotógrafos espía, aunque lo cierto es que queda algo lejos de Alemania y dudamos que se despidan del Nordschlife. Hablamos del AMG Speedway, localizado a nada menos que 38 kilómetros de Gangnam, un distrito de la capital de Corea del Sur, Seúl.
La pista toma como base el primer hipódromo permanente del país, el cual se inauguró en 1995 y se reconfiguró y expandió 16 años después. En su estado actual, tiene 4,3 kilómetros de longitud, tiene 17 curvas y serpentea sobre un puente ubicado en los terrenos del parque temático Everland Resort a las afueras de Seúl. La compañía asegura que el trazado «no solo ha adoptado el nombre, sino que también luce el diseño corporativo distintivo de AMG«, haciendo referencia a los diversos logotipos, las ubicaciones AMG exclusivas, el AMG Lounge, el área separada de boxes y el paddock.
Tal y como señala Tobias Moers, «el AMG Speedway es el primer hipódromo del mundo que lleva nuestro nombre. Esto subraya la importancia de Corea del Sur como uno de nuestros principales mercados«. Al mismo tiempo, el circuito representa la expansión estratégica de la comunicación de la marca cara a cara, pues ahora los clientes y los fanáticos de la marca pueden experimentar la esencia de los deportivos de primera mano en el trazado.