Es evidente que comprar un coche de segunda mano conlleva una serie de riesgos siempre, pero son muchas las personas que toman la decisión de hacerlo por la diferencia de precio que supone con respecto a un coche nuevo.
Así pues, se trata de una labor a la que hay que dedicarle tiempo. Pero si además de ser un coche usado se trata de un modelo diésel, las cosas se complican más, ya que los organismos oficiales están especialmente preocupados por estos vehículos. Es por ello que, a continuación, te damos una serie de consejos fundamentales que deberías seguir a la hora de comprar tu coche de segunda mano y diésel.
Antes que nada, pregúntate si realmente necesitas que sea diésel
Aunque parezca una obviedad, lo cierto es que muchas personas tienen el empeño de comprarse un coche diésel cuando en realidad no les hace falta. Hay que valorar distintos elementos, como por ejemplo si se le van a hacer muchos kilómetros al año, si tu ciudad tiene ciertas limitaciones en la circulación o el uso que le vas a dar al automóvil. Teniendo presente que los coches diésel se encuentran en el punto de mira, es mejor que tengas suficientemente claro que es el modelo de coche que necesitas.
Presta atención a la fecha de matriculación
En este caso no nos referimos al hecho de que cuanto más nuevo sea el coche, mucho mejor, sino que aquí lo que nos interesa son las etiquetas medioambientales.Un coche diésel que haya sido matriculado antes del 1 de enero del año 2006 no tendrá ni siquiera pegatina, lo cual será un problema en caso de vivir en Madrid o Barcelona, por las restricciones. Siempre que sea posible, lo mejor es elegir un coche matriculado a partir de 2014, porque tendrá la pegatina C, que es la mejor opción después de un híbrido.
Revisa el FAP y la EGR
Se ha convertido en una práctica frecuente eliminar el FAP si da problemas o anular la válvula EGR para bajar el consumo. Pero esto es un defecto grave en la ITV, que te puede llevar a tener que pagar hasta 1.000 euros para reemplazar estos sistemas.
Al hilo de esto, si encuentras un coche que no tenga pasada la inspección pero estás seguro de que te conviene comprarlo para arreglarlo, recuerda que puedes contratar una empresa que ofrezca el transporte de coches para llevarlo directamente al taller.
Cuidado con las cuestiones de mantenimiento
Cuando busques un coche diésel tendrás que tener especial cuidado con ciertos componentes, a saber: el filtro de partículas, la válvula EGR, los inyectores, el turbo, la correa de distribución, etc. Debes informarte también sobre si utiliza AdBlue, para tener una botella siempre preparada.
Entérate del uso que ha tenido antes el coche
Cuando se trata de un diésel, es normal pensar que su dueño se haya dedicado a hacerle gran cantidad de kilómetros, pero la mayoría de ellos en carretera y autopista, lo que haría que el desgaste de piezas como los frenos sea menor. Pero el éxito que han tenido estos coches a lo largo de la última década hace que sea probable que su dueño le haya dado un uso sobre todo por ciudad, y en ese caso el coche habría experimentado un mayor sufrimiento.