Probablemente el Aston Martin DB5 sea uno de los automóviles más emblemáticos del mundo, no sólo por su espectacular apariencia, sino por su participación en la gran pantalla.
Justo ahora, durante el mes de septiembre se cumplen exactamente 60 años desde que Aston Martin presentara un modelo que se ha convertido en un icono de la cultura, el diseño y la innovación británicos y que estableció firmemente a Aston Martin como una de las marcas de lujo más deseadas.
Seis décadas después, el DB5 sigue siendo uno de los coches más icónicos y reconocibles del mundo.
La era de David Brown nos dejó muchos deportivos de Aston Martin, pero ninguno más reconocible, venerado y deseado como el DB5.
Durante el año 1963, Aston Martin estaba disfrutando de una ola de popularidad y su DB4 se había vendido consistentemente bien desde su llegada a la marca en 1958. Aston Martin no era a la única que le iba bien y la competencia tanto nacional como extranjera pisaba muy fuerte.
Haciendo su debut público oficial en el Salón del Automóvil de Frankfurt en septiembre de 1963, el DB5 presentó varios cambios de diseño, técnicos y de equipamiento con respecto a su predecesor -en particular, un importante desarrollo del motor que entregaba aún más potencia- que justificaron el uso de un nombre completamente nuevo para el automóvil.
El DB5 exhibido en Alemania presentaba una nueva versión del motor de 4,0 litros (3.995 cc), muy reelaborada.
Esa potencia adicional fue parte de una serie de cambios técnicos y de equipamiento detallados, como el debut de elevalunas eléctricos y la disponibilidad opcional de aire acondicionado, que habían sido diseñados minuciosamente para satisfacer las expectativas de los clientes.
La berlina y más tarde, el descapotable que llevaban este inconfundible apodo entraron en producción en Newport Pagnell, Buckinghamshire.
Además de salir en la saga de 007, otras caras conocidas contaban con un DB5 en su garaje. Entre estos encontramos a Paul McCartney, George Harrison, Mick Jagger, Peter Sellers, Robert Plant, Jay Kay, Elle McPherson o Ralph Lauren.
De hecho, el atractivo del DB5 para las celebridades resultó ser un trampolín hacia el éxito y ayudó a que Aston Martin pasara de ser un fabricante británico de deportivos de nicho a ser una superestrella del automovilismo a nivel mundial.
Originalmente se fabricaron apenas 887 berlinas DB5, 123 descapotables y 12 shooting Brakes hechos por encargo. Incluso para los estándares de la época, estas cifras eran pequeñas, especialmente teniendo en cuenta que la producción de automóviles en el Reino Unido superó los 1,8 millones en 1963.
Bautizado como el coche de 4 asientos más rápido del mundo por superar los 240 km/h de punta, este modelo llevó a la gloria a la marca y hoy la misma marca, 60 años más tarde nos ha mostrado al «Abuelo» posando con su nuevo familiar, el Aston Marton DB12.
Galería Aston Martin DB5
Fuente | Aston Martin