A raíz de las declaraciones de varias entidades administrativas locales de Alemania, las grandes firmas están poniéndose manos a la obra y desde hace unos días/meses ofrecen “actualizaciones” que mejoran las emisiones de sus vehículos. En particular se trata de vehículos equipados con mecánicas diésel EU5 y EU6.
Audi acaba de anunciar que ofrece a sus clientes en Europa y otros mercados un programa de adaptación de motores diésel UE5 y UE6. Un total de hasta 850.000 coches en todo el mundo -con motores diésel de seis y ocho cilindros (V6 / V8 TDI )- obtendrán un nuevo software.
Esta actualización pretende mejorar sus emisiones de conducción en términos reales más allá de los requisitos legales vigentes. El trabajo se llevará a cabo en estrecha colaboración con el Instituto Federal de Transporte de Alemania (KBA).
De esta forma, Audi tiene la intención de reducir las emisiones globales, especialmente en áreas urbanas y de esta forma mantener la viabilidad futura de motores diésel para los clientes.
Esta actualización es muy similar a la derivada de la nueva postura del consejo de administración de Daimler, que hace unos días acordó un plan de futuro para los motores diésel.
En palabras de Dieter Zetsche, CEO de Daimler AG y director general der Mercedes-Benz Cars: “El debate público sobre el futuro del diésel inquieta a nuestros clientes. Por ese motivo hemos decidido tomar medidas adicionales para aumentar la confianza tanto de los conductores de vehículos con motores diésel, como en esta tecnología de propulsión. Estamos convencidos de que el diésel, especialmente por sus reducidas emisiones de CO2, seguirá siendo en el futuro una parte importante en el mix de las tecnologías de propulsión.”
El plan de futuro abarca una ampliación de las medidas de servicio voluntarias, así como una pronta introducción en el mercado de una familia de motores diésel de nuevo desarrollo.
Desde marzo Mercedes-Benz viene ofreciendo a sus clientes de vehículos compactos una mejora en el comportamiento de las emisiones de óxido de nitrógeno (NOx) para una versión de motores. Hasta la fecha se ha implementado en casi el 45% de estos vehículos. También para los clientes del Clase V, la empresa ofrece una medida de servicio voluntaria, habiéndose realizado en un 75% de los vehículos en Alemania.
Con el fin de mejorar de forma efectiva las emisiones de otros modelos, la compañía ha acordado ampliar esta medida de servicio a más de tres millones de vehículos. La experiencia obtenida por los ingenieros durante el desarrollo de la nueva familia de motores diésel será de utilidad para esta medida. Se llevará a cabo en casi todos los vehículos EU5 y EU6 en Europa y se realizará en estrecha colaboración con las autoridades alemanas de matriculación, algo que costará a Daimler casi 220 millones de euros.
Mercedes-Benz, con su nueva familia de motores de nuevo desarrollo, ha demostrado que la propulsión diésel también es capaz de cumplir con las exigentes normativas de emisiones de la EU, que implementará en el futuro. Con una inversión de casi 3.000 millones de euros, la compañía ha desarrollado una nueva generación de motores cuyos modélicos valores de emisiones han sido también certificados por institutos independientes. Tras la introducción al mercado del nuevo cuatro cilindros OM654 en la nueva Clase E en 2016, ésta nueva familia de motores modulares se extenderá progresivamente al resto de la gama de vehículos.