La marca germana de los cuatro aros está que arde y es que no para de presentar modelos constantemente. Los últimos en llegar han sido las variantes S de los Audi e-tron y e-tron Sportback.
Sí, eléctricos con acabado S, o mejor dicho, con una S en su denominación. Tanto el Audi e-tron como el Audi e-tron Sportback ganan en agilidad y dinamismo con las nuevas versiones S.
Los tres motores eléctricos, dos de ellos situados en el eje trasero, ofrecen en conjunto 370 kW (503 CV) de potencia máxima y un par que puede alcanzar los 973 Nm. Esto permite que los dos modelos eléctricos aceleren desde parado hasta alcanzar los 100 km/h en 4,5 s.
En el modo S de la transmisión, ambos aceleran de 0 a 100 km/h en 4,5 segundos, de forma suave y casi sin ruido; y pueden alcanzar una velocidad máxima de 210 km/h, límite establecido electrónicamente.
Gracias a un potente sistema de refrigeración, el motor proporciona una potencia total de 370 kW (503 CV) y 973 Nm de par de forma repetible y durante ocho segundos en cada caso. Los valores nominales con la palanca de cambios en la posición D, sin activación del modo boost, son 320 kW (435 CV) y 808 Nm.
Las nuevas versiones S del Audi e-tron son los primeros coches eléctricos del mundo producidos en serie con tres motores. Su diseño de propulsión se basa en el concepto de dos motores asíncronos diferentes; para ello, la gama e-tron se diseñó desde el principio bajo un concepto modular. El motor eléctrico más grande, que alimenta el eje trasero en las versiones 55, se instala en el eje delantero, con un diseño adaptado y configurado para ofrecer una potencia de 124 kW (169 CV), que alcanza los 150 kW (204 CV) en el modo boost. Una versión modificada del motor eléctrico más pequeño se instala por partida doble en el eje trasero. Entre los dos proporcionan una potencia de 196 kW (267 CV), alcanzando los 264 kW (359 CV) en modo boost.
Cada motor eléctrico está alimentado con corriente trifásica de su propia electrónica de potencia; la transmisión por engranajes planetarios con una relación fija transmite la fuerza a las ruedas. El motor eléctrico delantero está instalado en paralelo al eje por razones de espacio. Los dos motores eléctricos traseros están instalados coaxialmente y juntos por su parte trasera. La transmisión hacia las ruedas se realiza sin un diferencial mecánico y, por lo tanto, hace posible la vectorización eléctrica del par. Los ligeros conjuntos de placas del rotor son de aluminio fundido. El refrigerante fluye a través de los ejes del rotor, proveniente de un circuito de refrigeración común para ambos motores.
El sistema de baterías de alta tensión de las versiones Audi e-tron S está situado debajo del piso del compartimento para los pasajeros, en forma de un bloque largo (2,28 m), ancho (1,63 m) y plano (0,34 m). Cada uno de sus 36 módulos contiene doce células y tiene una capacidad de almacenamiento de energía de 95 kWh, de la cual la cantidad neta disponible para su utilización es el 91% (86,5 kWh).
La propulsión se ha programado pensando en la eficiencia para un uso cotidiano; en el modo de conducción normal, sólo funcionan los motores eléctricos traseros. La tracción delantera no actúa pero, si el conductor requiere más potencia, entra en funcionamiento automáticamente. También se conecta de forma predictiva si disminuye la adherencia. Lo hace cuando los valores de fricción son bajos y en curvas con gran aceleración transversal. La tracción eléctrica en todas las ruedas se complementa con otra innovación técnica: la vectorización eléctrica del par, que lleva a la era eléctrica las ventajas del diferencial deportivo convencional. A través de una transmisión, cada uno de los motores eléctricos traseros envía la fuerza de tracción a la rueda correspondiente, sin necesidad de que exista un diferencial mecánico.
De serie, las dos versiones S del e-tron equipan llantas de aleación de 20 pulgadas con diseño S de 5 radios en V. Se pueden solicitar diferentes llantas de hasta 22 pulgadas. Para lograr el dinamismo transversal típico de la gama S, la anchura de los neumáticos se ha ampliado hasta 285 mm en los tres diámetros de llanta: 20, 21 y 22 pulgadas. Unas pinzas de freno negras con un rombo rojo en forma de S, de seis pistones en la parte delantera, actúan sobre grandes discos de freno, que tienen un diámetro de 400 mm en las ruedas delanteras.
Los clientes de las versiones S tienen diferentes opciones a su disposición para realizar la carga en casa. El sistema de recarga compact opcional se puede conectar tanto a una toma trifásica de 400 V como en un enchufe normal de 230 V.
Durante un viaje, las versiones eléctricas S se pueden cargar con hasta 150 kW de potencia de corriente continua (DC), por ejemplo, en la red europea de Ionity. Esto significa que una carga del 5 al 80% sólo tardará alrededor de media hora.
Información | Audi España
Imágenes vía Autocar y Audi España