Seguro que recuerdas aquellas tiras de goma que se colocaban en el paragolpes trasero de los coches. Lo cierto es que hace algunos años eran muy habituales y, hoy en día, apenas se ven. Si bien la banda antiestática coche sigue cumpliendo la misma función que antaño, en la actualidad prácticamente ningún usuario se plantea usarla.
Si siempre te llamaron la atención esas extensiones de goma que cuelgan de algunos coches, hoy vas a poder saciar tu curiosidad y conocer para qué sirven realmente. La respuesta es muy sencilla y probablemente hayas escuchado que eran para evitar mareos, pero es un tanto complicado llegar a la explicación científica usando sólo el sentido común.
La causa: el fenómeno triboeléctrico
El motivo por el cual mucha gente recurría antaño a las bandas antiestáticas -que es como se llaman estas tiras de goma- no es otro que la electricidad estática. Seguro que alguna vez al subir o bajar del coche te has llevado un calambrazo. Pues bien, para evitar esta constante que nos acompaña en nuestra vida como conductores están las cintas antiestáticas.
El fenómeno triboeléctrico se produce por la electricidad por frotamiento. Un automóvil (como cualquier otro vehículo) que roza contra el aire durante la marcha hace que este se cargue con electricidad estática. También ocurre con nuestra ropa rozando con la tapicería de los asientos. Dependiendo de las condiciones climáticas, el coche puede adquirir un voltaje considerable.
La razón por la cual a veces el coche nos da calambrazos es porque la electricidad estática viaja de manera súbita entre dos objetos por diferencia de potencial. Por ejemplo, en las épocas frías dichos calambrazos suelen ser más frecuentes, ya que el aire pierde vapor de agua y la electricidad no encuentra salida para liberar la carga.
La carga positiva se acumula en nuestro cuerpo y no se libera hasta que entramos en contacto con una superficie conductora. En nuestro caso, el suelo actúa como polo negativo y el polo positivo suele ser la carrocería del coche, el coche en sí mismo o los propios ocupantes. En otras palabras, si no llevamos suelas de goma se genera un arco y actuamos como cable conductor.
Incluso con suelas de goma puede pasar que nos bajemos del coche, toquemos un elemento conectado a tierra, nos descarguemos y volvamos a tocar el coche, que sigue cargado, dándonos una pequeña descarga. Además de los molestos calambrazos, se atribuye a estas cargas estáticas el dolor de cabeza de los pasajeros en viajes largos y ciertos mareos.
Banda antiestática coche: la solución
Si tienes la mala suerte de padecer estos calambrazos con cierta frecuencia o dolores de cabeza durante los viajes, te recomendamos instalar en el coche una tira antimareo para descargar la electricidad estática. Esta “colita rutera”, como se la conoce en algunos países, sirve para conectar la carrocería del coche con el asfalto.
Lo ideal es colgar la tira de goma con alma metálica del paragolpes trasero del vehículo o de algún elemento metálico bajo, de forma que roce con el suelo y descargue la electricidad estática.
Si te parece demasiado horrenda, también puedes recurrir a algunos trucos de la vieja escuela, como cerrar la puerta del coche con la rodilla, bajarte del coche tocando el techo o sin soltar la parte metálica de la puerta y evitar utilizar prendas con tejidos sintéticos o propensos a la generación de electricidad estática.