Probablemente te suene el nombre de BMW M4 CS, y es que fue hace un año cuando BMW España lanzó esté modelo en nuestro mercado a modo de edición limitada nacional. Al parecer, la fórmula gustó en la matriz, y con motivo del Salón de Shanghái 2017, la firma bávara ha dado a conocer una edición especial del BMW M4 con esta misma denominación: te presentamos el BMW M4 CS 2017.
Este nuevo modelo de la marca se posiciona entre el BMW M4 Coupé y el BMW M4 GTS, con todas las mejoras estéticas y aerodinámicas de los accesorios deportivos de BMW M Performance, así como otros componentes de serie que han sido convenientemente adaptados. El resultado final es un BMW con genes de competición, una potencia que asciende hasta los 460 CV y una velocidad punta deslimitada de los 250 a los 280 km/h.
Se ha buscado ante todo un equilibrio entre precisión, prestaciones y control para crear este BMW M4 Competition Sport Edition, el cual se ha afinado nada menos que en Nürburgring. Además de haber aumentado la potencia del M4 original, el chasis M adaptativo mejora el comportamiento del vehículo con una amortiguación que se adapta a las diferentes situaciones que podamos encontrar en carretera. El diferencial M adaptativo y el control dinámico de estabilidad (DSC) han sido diseñados para tener un comportamiento específico.
Aunque en su día el BMW M4 CS equipaba unas llantas de 20 pulgadas con un diseño heredado de su hermano mayor, el BMW M4 GTS, en este caso el modelo adopta unas llantas de aleación de nueva factura y un tamaño de 19 pulgadas en el eje delantero y 20 pulgadas en el trasero. Tanto los neumáticos delanteros como los traseros equipan neumáticos de altas prestaciones y perfil bajo, en este caso, los Michelin Pilot Sport Cup 2 en medidas 265/35 y 285/30, aunque opcionalmente se pueden pedir otros menos radicales. Estas espectaculares llantas esconden unos frenos carbono-cerámicos que aumentan la resistencia a la fatiga frente a los discos usados normalmente, así como reducen el peso en 6,5 kilos.
En el interior, encontramos unos asientos de nuevo diseño con mejoras en el agarre lateral a la altura de los hombros gracias a unas aletas optimizadas que nos brindarán un mayor confort en conducción. No faltan los tapizados en cuero y Alcántara, la fibra de carbono, las inscripciones ‘M’ y ‘CS’, los tres colores característicos de la división deportiva de BMW e incluso un tapizado de fibras naturales compactadas para el guarnecido de las puertas, a fin de hacer el modelo lo más ligero y exclusivo posible.
Mejoras tanto en el frontal como en la zaga se unen a unos faldones laterales específicos que son los encargados de canalizar el aire. También el difusor trasero mejora el flujo de aire para mejorar al máximo la experiencia de conducción de este vehículo.
A su vez, los componentes y accesorios exclusivos de M Performance dotan a este nuevo M4 Competition Sport Edition de una personalidad única en el exterior, así como en su comportamiento. El exterior con piezas de fibra de carbono (CFRP), como el splitter delantero que contribuye a la refrigeración del motor y de los frenos y, además, compensa las fuerzas de adherencia creadas por el spoiler trasero y el prominente difusor Gurney. Adicionalmente, se ofrecerán dos colores exclusivos para la carrocería, los ‘San Marino Blue Metallic’ y ‘Lime Rock Grey Metallic’.
El nuevo BMW M4 Competition Sport Edition está equipado con un propulsor BMW M TwinPower turbo de 3.0 litros y seis cilindros en línea heredado del BMW M4 Coupé, el cual desarrolla 460 CV de potencia máxima y 600 Nm de par motor. Con una velocidad punta de 280 km/h y una aceleración de 0-100 km/h en 3,9 segundos, se queda justo entre el BMW M4 Coupé y el BMW M4 GTS. El consumo sorprende con tan solo 8,4 l/100km pese a ser un vehículo de tan altas prestaciones.
En cuanto al cambio, esta edición especial solo estará disponible con un cambio automático de doble embrague 7 velocidades M DKG con Drivelogic. Gracias a esta transmisión podremos activar la función “Launch Control” que permitirá salidas de competición sin perder por ello tracción. El indicador de cambio de marchas nos permitiría conocer el momento idóneo para realizar la transición y el control de estabilidad actúa mediante el desacople del embrague cuando el coche tienda a sobrevirar, siempre y cuando no esté conectado.
David Navarro Chueca
están llegando a diseño nivel DIOS