En BYD Auto están tan seguros del producto que comercializan que incluso se atreven con el complicado mercado japonés, un lugar en el que los vehículos importados tienen una cuota muy pequeña y no suelen gozar de gran popularidad, salvo en el caso de las marcas premium.
La intención de BYD Auto es poder comercializar en 2025 nada menos que 30.000 unidades de sus vehículos eléctricos, una cifra elevada para una marca nueva, importada y además de origen chino. La marca comenzará su actividad comercial el próximo mes de enero con la apertura de los primeros 51 concesionarios.
BYD Auto Japan contará en 2025 con unos 100 puntos de venta que se enfocarán en la comercialización de varios modelos de la marca. La idea es arrancar el próximo mes de enero con los Dolphin y Atto3 y ampliar la oferta en la primavera con el lanzamiento del bonito Seal.
El precio recomendado del nuevo BYD Dolphin en Japón arranca en los 3.630.000 yenes, unos 23.230 € al cambio actual para la versión de acceso con 95 CV y la batería de 44,9 kWh con la que se declaran 400 km de rango. El Atto3 parte de los 4.400.000 yenes (28.158 €) equipado con una mecánica de 204 CV asociado a una batería con 58,5 kWh de capacidad con la que declaran 470 km según el ciclo de homologación japonés.