La llegada del Dodge Challenger SRT Demon está a la vuelta de la esquina y el Chevrolet Camaro ZL1 parece estar sintiéndose un tanto amenazado. Pero que no cunda el pánico, ha llegado Hennessey Performance Engineering con su brutal ‘Exorcista’ para poner en jaque hasta al mismísimo ángel negro, y es que los chicos del preparador nunca se han andado con tonterías, acumulando ya a sus espaldas más de dos décadas modificando los mejores superdeportivos que podemos encontrar en el mercado.
Estéticamente, destaca el vinilo en rojo con la frase ‘The Exorcist’, pero este ZL1 mantiene todos sus componentes originales, tales como el paragolpes delantero con un splitter más prominente, las aletas ligeramente ensanchadas, entradas de aire para mejorar la refrigeración de los componentes mecánicos, un alerón de mayores dimensiones para mejorar la carga aerodinámica a altas velocidades y unas llantas multiradio de 20 pulgadas rematadas en grafito y equipadas en este caso con neumáticos de Nitto de drag (los mismos que el Demon).
Pero por si su amenazadora estética no fuera suficiente, la guinda del pastel se esconde en el interior de la bestia. El poderoso bloque V8 LT4 de 6.2 litros sobrealimentado por compresor que también equipa el Chevrolet Corvette Z06 ha visto elevada su potencia desde los 640 CV y 868 Nm de par máximo hasta nada menos que 1.000 CV (746 kW) y 1.310 Nm de par máximo, todo ello a fin de crear una especie de Veyron de la pajarita lista para acabar con todos tus demonios gracias a un compresor mayor, un nuevo intercooler, un árbol de levas más agresivo y diversos retoques en la ECU, la admisión y el escape.
Está disponible con la caja manual de seis velocidad o la automática de 10 relaciones -es necesario reforzarlo, pero en ambos casos su aceleración es salvaje, ya que tarda menos de 3,0 segundos en alcanzar los 100 km/h y cubre el cuarto de milla en menos de 10 segundos. Presentado en el Houston Auto Show, el deportivo es tan exclusivo que solo se fabricarán un total de 100 unidades al año, por las cuales habrás de pagar unos 51.500 euros, Camaro ZL1 aparte. Eso sí, el juguete viene hasta con el kit de herramientas y el gato específicos.
Échale un vistazo al vídeo porque la mezcla entre el Padre Karras y The Stig que han preparado los chicos de Hennessey no tiene ningún desperdicio. Todo ello amenizado con Highway to Hell de fondo, como no podía ser de otra manera.
Cualquier auto modificado puede ser más potente y rápido que uno salido de la fábrica.