El Volkswagen Golf es uno de los mayores éxitos del fabricante alemán y desde el comienzo de su producción se han vendido más de 30 millones de unidades en todo el mundo de todos los colores y variantes posibles. Un coche que con el paso de los años ha evolucionado radicalmente para adaptarse en diseño y tecnología a las nuevas modas, y que nos ha dejado auténticas rarezas y versiones que apenas son conocidas en el mundo.
Josef Juza es un austriaco que vive especialmente su pasión por el Volkswagen Golf, y es que en su garaje esconde hasta un total de 114 ejemplares de este modelo entre los que podemos encontrar todo tipo de variantes y rarezas que muy pocos conocen. La fascinación de este hombre por el compacto alemán resulta sorprendente, todo comenzó cuando se sentó por primera vez en uno y sintió que ese coche estaba construido para él, desde ese momento ha dedicado su vida toda su vida al Golf.
Su colección comenzó como parte de su trabajo, cuando conducía un Volkswagen Caddy de segunda generación, desde ese momento su garaje comenzó a crecer exponencialmente. Al principio consiguió reunir algunos de los modelos más populares, un Golf GTI para divertirse los fines de semana, un Golf Cabrio para disfrutar del sol en verano o un Golf Country para el invierno. Aunque, sin duda alguna, su colección se debe a un Golf de primera generación que compró en una exhibición de coches en la década de los 90′.
Así, esta colección ha ido creciendo hasta que tuvo que comprar un almacén de grandes dimensiones a las afueras de Viena para poder guardar todos los coches en un mismo lugar. A lo largo de los siguientes años, Josef ha ido haciéndose con más y más Golf, completando su colección con modelos cada vez más raros o ediciones limitadas de las que probablemente nunca hayas oído hablar.
«Tan solo tuve que echar un vistazo rápido en Internet y pronto encontré otro gran coche que no costaba prácticamente nada. El transporte a menudo era más caro que el precio del coche«
Una de las joyas de esta gran colección es un Golf de preproducción de 1974 con una peculiar puerta corredera hacia delante, aunque también guarda con cariño dos Golf eléctricos que recibían el nombre de CitySTROMer y utilizaban baterías de electrolitos de gel. A esta larga lista de rarezas también hay que sumar uno de los 71 Golf G60 Limited que se fabricaron, construidos a mano por Volkswagen Motorsport. Tampoco podía faltar un Golf Rallye de 1989.
No falta ni una sola pieza en esta colección, podemos encontrar desde un Volkswagen Golf adaptado con escalera que fue utilizado en el aeropuerto de Bremen hasta un Golf GTI personalizado para un príncipe en Oriente Medio. Ahora este apasionado coleccionista planea abrir su gran colección al público, aunque si algo tiene claro Josef es que ninguno de sus coches están a la venta, antes prefería prescindir de toda la colección.