Los frenos son un elemento básico en la conducción y, por seguridad, no conviene descuidarlos en exceso, además de que sus arreglos pueden variar mucho de precio en función del cuidado que tengamos.
En los sistemas de un coche, uno de los más simples y baratos, pero más importantes, son los frenos. Independientemente del tipo que lleve cada coche, es fundamental tenerlos siempre a punto y preparados para obtener una buena frenada cuando lo necesitemos, ya que nunca sabemos cuándo los vamos a usar de manera brusca.
Son uno de los elementos del coche cuya sustitución es más cotidiana, sobre todo cuando hablamos de pastillas de freno y discos. En los automóviles más modernos, el momento de su sustitución suele estar avisado por un testigo que se enciende en el cuadro de mandos cuyo significado puedes encontrar en este artículo de Sport, pero en los más antiguos lo mejor es controlarlos con cada revisión y no ajustar demasiado las pastillas.
Normalmente se estima una cantidad de entre 30.000 y 40.000 kilómetros para las delanteras y de unos 60.000 en las traseras, aunque como siempre, todo dependerá del vehículo en cuestión y del tipo de conducción que se haga. Lo mejor es tenerlas localizadas en páginas como Daparto para así en el momento de comprarlas, cuando nos acerquemos a esa cantidad de km, conseguirlas sin ningún tipo de problema y sabiendo siempre que esas son las que necesitamos.
Los discos, cada más tiempo
Lo común es cambiar las pastillas y no tener que hacer lo mismo con los discos de freno, de una mayor durabilidad que estas. De hecho, se suele estimar que cada dos cambios de pastillas se hace uno de discos, algo más caros de comprar.
Aunque, como se ha apuntado anteriormente, tener un juego de discos de freno de Daparto ya mirado siempre ayudará a agilizar el proceso de su sustitución gracias a la rapidez que ello nos puede llevar. Sobre todo porque este buscador y vendedor de recambios de coches hace un filtro inicial por la marca y modelo de los automóviles y sirve de esta manera las piezas específicas para el que se necesita, con una amplia gama de marcas y precios. Facilidades que también encontramos en todo tipo de repuestos.
No hay que olvidarse del líquido de frenos
Además, aparte de los discos y pastillas, que es el sistema que más se suele emplear en los automóviles, también hay que vigilar otros aspectos como el líquido de frenos, normalmente aconsejado cambiarlo por los fabricantes cada dos años más o menos. De este dependerá la fuerza que transmitamos cuando accionamos el pedal para detener el coche o disminuir la velocidad a todo el sistema.
Por lo tanto, si tienes controlados estos tres apartados lo normal es que no tengas problemas nunca en los frenos, uno de los sistemas más importantes del coche en cuanto a la seguridad se refiere. Eso sí, siempre es aconsejable acudir al taller cuando comencemos a notar ruidos o vibraciones persistentes en la frenada, uno de los modos que existen para saber que las pastillas están desgastadas.