Hyundai nos presentó ayer el nuevo Tucson, un modelo que cuenta con un diseño experimental avanzado y tecnología punta para buscar establecer nuevos estándares en el segmento SUV compacto. La cuarta generación del Tucson llega con un aspecto revolucionario y ambicioso que busca establecer la nueva imagen de la marca.
Más que una simple evolución, el nuevo Tucson representa una revolución para Hyundai en términos de diseño. En general, presenta un cuerpo más grande y ancho que su predecesor. Destaca ante todo la parte delantera del vehículo, cubierta de patrones geométricos oscuros con exclusivas luces LED de conducción diurna (DRL).
Éstas quedan perfectamente integradas en la rejilla. Gracias a la tecnología de iluminación de medio espejo, cuando las luces de conducción diurna están encendidas, la apariencia del cromo oscuro de la parrilla se transforma en formas similares a una joya. Las formas atléticas se fusionan a la perfección en los pasos de rueda angulares..
En la parte trasera, las luces traseras anchas con detalles de luces ocultas paramétricas continúan el tema mostrado en el frontal. Además, es el primer modelo de Hyundai que aplica limpiaparabrisas traseros ocultos, que se colocan debajo del spoiler. Según Hyundai el interior es espacioso y sofisticado.
La perfecta integración de la tecnología en parte se experimenta a través de la nueva pantalla AVN-T de 10,25 pulgadas instalada en posición central. Los diseñadores de Hyundai prescindieron de las perillas y botones físicos.
Según la marca, los materiales suaves al tacto de alta calidad aparecen en todo el interior, elevando el aspecto y la sensación a un nuevo nivel, mientras que las nuevas salidas de aire indirectas comienzan en las puertas y fluyen hacia la consola central. La pregunta del millón es: ¿a vosotros qué os parece el nuevo diseño?