Aprovechando el reciente debut del Mercedes-Benz GLS en el Salón del Automóvil de Nueva York, he querido traeros una particular comparativa visual entre el mastodóntico SUV de la estrella y su gran rival en el mercado, el también recién estrenado BMW X7. Más allá de las diferencias y similitudes estéticas que podremos ver en las imágenes, repasemos algunos de los datos esenciales.
Por su parte, el Mercedes-Benz GLS mide 5.20 metros de largo (5.21 metros en el caso del 580), 2.16 metros de ancho y tiene una batalla de 3.134 mm. Esto la hace todavía mayor que la del BMW X7, que cuenta con unos nada despreciables 3.104 mm. En el SUV bávaro, la longitud es de 5.15 metros, el ancho de 2.00 metros y la altura de 1.80 metros.
En cuanto a las mecánicas del GLS, por una parte tenemos el GLS 450 4MATIC que equipa un motor con seis cilindros gasolina, 367 CV (269 kW) de potencia y 500 Nm de par; y por otro -también en gasolina-, el GLS 580 4MATIC que equipa un V8 de 4.0 litros con doble turbo y tecnología híbrida EQ Boost que genera 489 CV (364 kW) y 699 Nm de par.
Ambas mecánicas integran una red eléctrica de 48V, incorporando el dispositivo ISG que hace las funciones de motor de arranque y alternador.
El GLS 450 es capaz de alcanzar los 96 km/h desde parado en 5.9 segundos, mientras que el GLS 580 lo hace en 5,2 segundos. Ambos alcanzan una velocidad máxima limitada electrónicamente a 209 km/h. En la rama de los diésel, veremos el bloque OM 656 de seis cilindros en línea y 2.9 litros en dos versiones: el GLS 350 d 4MATIC con 286 CV y 600 Nm de par; y el y el GLS 400 d 4MATIC con 330 CV y 700 Nm de par. Conoceremos más detalles en el Salón de Frankfurt 2019.
Los interesados en el nuevo BMW X7 podrán elegir la versión xDrive40i como opción de acceso en gasolina. Tiene un motor de 3.0 litros y seis cilindros que desarrolla 340 CV de potencia y se combina con una caja de cambios automática con ocho velocidades y con el sistema de tracción total a las cuatro ruedas.
En diésel la gama parte con el xDrive30d asociado al bloque de 3.0 litros y seis cilindros que desarrolla 265 CV de potencia. Como ocurre en todos los X7, equipa la caja automática de ocho velocidades y tracción total. Los que busquen mayores prestaciones podrán elegir el M50d con nada menos que 400 CV bajo el capó. Ahora la pregunta es… ¿Y tú con cuál te quedarías?