Hace unas semanas acudimos a la presentación del renovado Škoda Octavia Scout, un modelo que ha recibido una actualización de equipamiento, tecnología y sistemas de entretenimiento y ayuda que sin lugar a dudas, refinan aún más un producto que ya era redondo.
Sí, es un segmento interesante y todo porque los turismos familiares preparados para recorrer algunos caminos sin demasiada complicación son, sin duda alguna, una alternativa muy seria a los SUV. Personalmente me parecen una opción mucho más lógica para quienes necesiten espacio y tengan que recorrer algunos caminos o vías en mal estado sin complicaciones.
Cambios en el exterior que ganan en directo
El frontal de este modelo tiene un parachoques específico Scout con molduras en negro y plata y un contorno más fuerte que el del Octavia.
El renovado Škoda Octavia Scout equipa la nueva sección frontal compuesta de una parrilla más ancha y dinámica y rematada por un conjunto bifaro con tecnología full-LED y sistema de iluminación adaptativa.
Los faros delanteros exteriores emiten las luces de cruce. Los faros interiores, ahusados hacia la parrilla, emiten las luces largas. Los faros delanteros crean haces de luz configurados individualmente para circular por carreteras, autopistas, en ciudad y en condiciones lluviosas. El borde inferior de los faros delanteros contiene un grupo de luces con los intermitentes y los faros diurnos, ambos en tecnología LED.
Los faros anti-niebla, situados en la amplia toma de aire inferior, también disponen de tecnología LED y pueden equiparse, opcionalmente, con función adaptativa.
Los diseñadores de Škoda también le han dado a la vista lateral de este nuevo Scout un aspecto más musculoso y robusto en consonancia con el frontal. Las molduras en negro de las puertas recorren los laterales y los pasos de rueda a ambos lados del vehículo. También destacan las tiras de protección lateral en plástico negro y el aluminio de las carcasas de los retrovisores. Opcionalmente, se pueden montar barras del techo con aspecto de aluminio.
Comparado con la generación anterior, la distancia entre ejes se ha incrementado en 10 centímetros (de 2.578 a 2.679 mm) y enfatiza las nuevas y sorprendentes proporciones musculosas del Scout, lo mismo que hace el voladizo delantero, que ahora es de 899 mm por los 925 anteriores.
Tal como viene siendo típico en Škoda, la parte posterior del Scout es precisa en su diseño, con líneas limpias y ordenadas que muestran la forma característica en C de las luces posteriores y los elementos triangulares. En la parte izquierda del portón trasero está el logo de la marca, mientras que el de Scout luce en la derecha.
Los elementos más bajos de la zona posterior están acentuados. Como sucede delante, el llamativo parachoques proporciona un aspecto único. Los elementos triangulares bajo las luces destacan la fuerza del Scout y forman un detalle característico de diseño en el exterior del vehículo. A izquierda y derecha del parachoques, se encuentran los deflectores (ojos de gato), y los componentes inferiores de color negro incluyen la pieza off-road plateada en el centro.
Un interior que mejora su aspecto y calidad
El interior ha sido especialmente diseñado para el Škoda Scout. Los marcos de las puertas delanteras llevan escrito el nombre Scout y los paneles son de un diseño Scout único. También el volante multifunción de tres brazos y el pomo del cambio de marchas muestran el emblema Scout. El salpicadero está disponible en el negro clásico o en combinación negra y marrón, mientras que los asientos están disponibles en tela marrón o en combinación cuero/Alcántara, que puede ser negro o marrón.
Tras el volante encontraremos un cuadro de instrumentos en el que encontramos 4 esferas bien definidas con un fondo blanco. En el centro destacamos un display a color con todas las funciones del ordenador de a bordo, teléfono sistema de infoentretenimiento.
En el interior se han producido varios cambios a mejor, y estos están esencialmente enfocados a ofrecer un mejor aspecto visual, un mayor confort y un mayor equipamiento de tecnología y seguridad. A grandes rasgos, cuenta con un espacio interior abundante cuyas líneas horizontales hacen un mayor énfasis en la sensación de espacio y amplitud, además de una notable evolución en la calidad percibida.
Los diferentes elementos de equipamiento interior varían en función del acabado elegido, por lo que os aconsejo que le echéis un vistazo a nuestro apartado de equipamiento y precio e incluso al propio configurador de la marca para descubrir todo el extenso listado de equipamiento que incluye cada una de las versiones de forma específica.
En cuanto a la habitabilidad, el Octavia cuenta con una postura de conducción de altura media, quedando todo al alcance del conductor sin tener que desviar la atención, a lo que se suman un gran tacto de los materiales, una respuesta rápida y eficaz de la pantalla táctil y unos asientos muy cómodos que ofrecen un mullido más que aceptable tanto en la banqueta como en el respaldo. Lógicamente, los acabados más altos incluyen regulación eléctrica con función de memoria e incluso ajuste lumbar.
Pero lo más reseñable es que a pesar de sus dimensiones, el Octavia ofrece buen espacio en las plazas traseras y permite albergar hasta cinco ocupantes en su interior, aunque si la persona que viaja en la plaza central posterior es un adulto estos no irán excesivamente cómodos por la anchura del modelo y la intrusión del túnel de transmisión.
La filosofía ‘Simply Clever’ que siempre ha caracterizado a la marca está más presente que nunca en el Octavia, con diversas soluciones que también hemos visto en otros modelos recientes del fabricante checo como el paraguas integrado, un enchufe convencional en las plazas traseras, una ranura para dejar el móvil, entradas USB atrás o una rasqueta para el hielo.
Por primera vez, el Scout incorpora la alfombrilla de doble cara en el maletero: durante la utilización normal, la moqueta de alta calidad asegura comodidad y un aspecto excelente. La alfombra se puede girar fácilmente para cargar objetos sucios como botas, macetas, botas de esquí, etc. ya que no absorbe la suciedad ni el agua.
El llamado elemento de fijación de carga es una novedad en el Scout, y permite sujetar cajas y objetos voluminosos de todo tipo. Este mecanismo queda recogido en la parte derecha del maletero y se despliega en caso de necesidad, pudiéndose fijar en el suelo con velcro. El objeto a fijar se coloca entonces fácilmente entre el elemento fijador y la pared del maletero.
El maletero tiene una capacidad de 610 a 1740 litros y gracias a su ancho de 1010 mm, también es perfectamente adecuado para el transporte de cargas voluminosas sin ningún problema. Numerosas soluciones de almacenamiento en el interior aumentan su practicidad. La capacidad de remolque es de hasta dos toneladas, dependiendo de la versión del motor.
Equipamiento y Seguridad: Más de todo
Los nuevos sistemas de asistencia al conductor del Scout proporcionan una mayor seguridad, y su alcance y funcionalidad superan la oferta habitual. El Front Assist con función de Freno de Emergencia en Ciudad ha sido mejorado con la función de Protección Predictiva de Peatones. El sistema mejora la seguridad en tráfico urbano realizando paradas de emergencia a velocidades de entre 10 y 60 km/h si un peatón se cruza en la trayectoria del vehículo. El Front Assist, junto con el Freno de Emergencia en Ciudad y la Protección Predictiva de Peatones, funciona en colaboración con el Asistente de Protección del Pasaje, que cierra rápidamente las ventanas y el techo panorámico en caso de accidente inminente y tensiona los cinturones de seguridad del conductor y de los pasajeros.
El Detector de Ángulos Muertos, que hace que los cambios de carril sean más seguros, es otra característica nueva. Gracias a dos sensores radar en la sección posterior, el Detector de Ángulos Muertos detecta a los vehículos que se acerquen a gran velocidad por detrás o que ya se encuentrenen el ángulo muerto del vehículo.
El sistema de Alerta de Tráfico Posterior monitoriza y protege el coche durante la marcha atrás al intentar salir de una plaza de aparcamiento o de una entrada, también está disponible por primera vez.
Como novedad, el modelo equipa el Asistente de Remolque, un sistema que facilita muchísimo las maniobras en marcha atrás con remolque. El conductor empieza seleccionando el ángulo deseado para la marcha atrás, usando el regulador de los retrovisores exteriores. A continuación, el conductor solo tiene que acelerar suavemente. El sistema hace el resto: ajusta el volante para seguir la trayectoria definida y maniobra el remolque con seguridad hasta la posición requerida. Si el ángulo entre el vehículo y el remolque crece demasiado, el sistema emite una señal de aviso. En situaciones críticas, el sistema detiene el remolque de forma automática.
Si eres de los cómodos a la hora de aparcar, el modelo ahora equipa Asistente de Maniobra, que proporciona ayuda durante las maniobras complejas sin remolque. El sistema frena el vehículo a la que detecta un obstáculo delante o detrás del mismo.
Además, de las novedades el modelo puede equipar el Control de Crucero Adaptativo (ACC), el Lane Assist, el sistema de detección de fatiga, el Travel Assist con Reconocimiento de Señales de Tráfico, el Park Assist o el Light Assist regula automáticamente las luces largas.
Dejando a un lado los asistentes, de serie el modelo cuenta con nueve airbags, incluyendo un airbag para las rodillas del conductor, sujeción Isofix y control de presión en los neumáticos.
Comportamiento
Una conducción estable y una suspensión equilibrada y cómoda eran los objetivos de los desarrolladores del chasis del Škoda Scout, y tras haberlo conducido durante varios kilómetros por diferentes vías debo decir que han logrado un conjunto realmente satisfactorio, tanto en la versión TSI 180 CV como en la TDI 150 CV.
El eje posterior multipunto se ha mejorado sistemáticamente, sobre todo en lo que respecta al peso. La utilización de acero ultraligero, junto a las mejoras estructurales en muchos componentes, han reducido el peso en 4 kilos en comparación con el modelo anterior, alcanzando los 49 kilos actuales. El principio de diseño, que separa de forma sistemática la rigidez longitudinal y transversal, asegura una comodidad excelente y una mejor conducción.
En la parte delantera, el nuevo Scout incorpora los brazos frontales McPherson con nuevos triángulos inferiores evolucionados. El acero de alta resistencia y el diseño de la biónica en el pivote del eje de balancín contribuyen al ahorro de peso y a mejorar la estabilidad. El subchasis montado centralmente en el eje delantero está diseñado para proporcionar la mayor rigidez transversal. En conjunto, en el eje delantero se han ahorrado 2,8 kilos.
La distancia entre ejes del nuevo Škoda Scout se ha incrementado respecto a su predecesor. Esta mayor distancia entre los ejes delantero y trasero tiene una incidencia positiva en la estabilidad de la conducción en carretera.
En algunos momentos y siempre hablando del TDI 150 CV, por debajo de las 1.750 rpm notaremos el motor algo falto de fuerza, pero en cuanto alcanza las revoluciones en las que entrega su par máximo, veremos cómo empieza a empujar con bastante fuerza de manera constante hasta las 3.000 revoluciones.
Circulando por autopista y vías rápidas se muestra con un buen aplomo, y lo que es más importante, no nos fatigaremos pese aunque tengamos que pasar en su interior mucho tiempo y muchos kilómetros, en este sentido, resulta bastante cómodo. Incluso para los pasajeros de las plazas traseras por el generoso espacio que tienen para las piernas.
En carreteras de curvas, las carrocerías familiares tienden a “culear” un poco, por sus dimensiones y formas, pero en el caso del Škoda Scout, al tener tracción a las cuatro ruedas, queda perfectamente equilibrado y nos permitirá trazar una curva detrás de otra, con una agilidad propia de un turismo que de un vehículo familiar elevado.
Fuera del asfalto, la distancia libre al suelo nos permite meternos por terrenos con relativa dificultad y la suspensión pese a dar aplomo en la carretera, ofrece un filtrado de las imperfecciones muy elevado.
Tanto el eje delantero como el trasero están equipados de serie con un bloqueo electrónico de diferencial (EDL). Para descensos más seguros y fáciles en terrenos accidentados, la función Off-Road está disponible para el Scout. Cuando se hace uso de la misma, la velocidad del vehículo se mantiene constantemente sin que el conductor tenga que hacer nada. La gestión del motor aumenta la seguridad durante los descensos mediante frenado, facilitando la vida del conductor.
El paquete de carreteras en mal estado también forma parte del equipamiento estándar y cuenta con cubiertas de plástico para el tren de rodaje, así como las líneas de frenos y combustible.El modelo equipa llantas de aleación de 17 pulgadas con neumáticos 220/50 R17.
Motorizaciones
Por el momento la marca oferta el Scout asociado a tres motores, todos ellos ajustados a la normativa de emisiones EU6 y asociados a la tracción a las cuatro ruedas.
Por el momento, el motor de gasolina usado por el Škoda Octavia Scout es un motor TSI turbo de inyección directa y cuatro cilindros. El potente 1.8 TSI genera 180 CV de potencia, ofrece un par motor máximo de 280 Nm y se combina con una transmisión DSG de 6 velocidades de serie, que permite al modelo acelerar de 0 a 100 km/h en 7,8 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 216 km/h. El par motor máximo de 280 Nm se alcanza entre 1.350 y 4.500 rpm.
Aunque por el momento sólo tenemos esta variante, lo más posible es que el fabricante termine ofreciendo el motor 1.4 TSI de 150 CV también en nuestro mercado.
En la oferta diésel, la marca cuenta con un motor diésel de 2.0 litros disponible en dos variantes de potencia. Ambas variantes son motores TDI turboalimentados de inyección directa con cuatro cilindros, así como con tecnología de cuatro válvulas. La variante que genera 150 CV de potencia está disponible con transmisión manual de 6 velocidades o con transmisión DSG de 7 marchas, de reciente desarrollo.
La versión manual acelera de 0 a 100 km/h en 9,1 segundos, y tiene una velocidad máxima de 207 km/h. El par motor máximo de 340 Nm se alcanza entre 1.750 y 3.000 rpm.
El tope de gama es un motor diesel equipado de serie con transmisión DSG de 6 velocidades y 184 CV de potencia, lo que significa que el ŠKODA OCTAVIA SCOUT puede acelerar de 0 a 100 km/h en 7,8 segundos y alcanza una velocidad máxima de 219 km/h. El par motor máximo se alcanza entre 1.750 y 3.250 rpm.
He de confesar que la variante gasolina de 180 CV mueve al Scout de forma impecable, cuenta con buenas respuestas y buenas recuperaciones, sin embargo, la opción de 150 CV sería la ideal. En la oferta diésel la cosa va en gustos aunque personalmente opinio que con la variante de 150 CV es más que suficiente, incluso si se va a hacer un uso intensivo de remolque.
Precios sin promociones
Nuevo Scout 1.8 TSI 132 kW (180CV) DSG 4×4 33.520 euros
Nuevo Scout 2.0 TDI 110 kW (150 CV) 4×4 32.030 euros
Nuevo Scout 2.0 TDI 135 kW (184 CV) DSG 4×4 34.410 euros