Los cierres generados por la crisis sanitaria y ahora los altos costes de muchas materias primas y sobre todo, los altos costes energéticos están causando verdaderos estragos en las cadenas de suministro y producción y mucho cuidad con la luna y los cristales de coche.
Al parecer, tal y como confirma WSJ, algunas empresas de automóviles y de lunas se están preparando para una posible escasez de vidrio si la pérdida del gas ruso estrangula la producción.
A medida que Moscú reduce las exportaciones de gas natural a Europa, los gobiernos europeos han elaborado planes de contingencia para alentar la conservación y racionar el gas entre las industrias intensivas en energía en caso de que se agoten los suministros. La producción de vidrio se ha convertido en una vulnerabilidad clave. Requiere fundir arena, carbonato de sodio y piedra caliza, y en Europa la energía para crear las temperaturas requeridas proviene en gran medida del gas.
El vidrio se usa en muchas áreas clave como ventanas, parabrisas de automóviles, pantallas botellas, medicamentos, refrescos y mucho más.
El «corte del suministro de combustible provocaría una nueva crisis de escasez de piezas», dijo recientemente Silja Pieh, jefa de estrategia del fabricante de automóviles de Audi AG, citando el vidrio como un excelente ejemplo.
Aunque la Comisión Europea incluyó la fabricación de vidrio en julio en su lista de industrias a las que se les dará prioridad si se raciona el gas este invierno, muchas empresas ya están acumulando existencias.
El gigante automovilístico alemán Volkswagen AG, está aumentando su inventario de componentes que usan vidrio, como ventanillas y parabrisas, y recurriendo a proveedores fuera de Europa no afectados por la crisis del gas.
Aunque antes de la escasez de gas, algunos vidrieros estaban haciendo planes para cambiar a hidrógeno verde o electricidad como fuentes renovables para reducir sus emisiones de carbono, estos planes a largo plazo no mitigarán la crisis actual.
Fuente | WSJ