La nueva generación del Ford Kuga por fin ha visto la luz. Uno de los productos más exitosos de la firma estadounidense es también uno de los pilares fundamentales en el nuevo plan estratégico que pretende darle mayor importancia y protagonismo a los crossovers.
Más ligero que su antecesor en hasta 91 kilos, el nuevo Kuga crece ligeramente a lo ancho y en longitud (4,62 metros), adoptando una estética más deportiva inspirada en los últimos Focus. Las formas generales del crossover han perdido algo de rudeza para hacerlo más atractivo a los clientes que habitualmente caían rendidos a los turismos convencionales.
El interior del nuevo Kuga no sorprenderá a nadie, luciendo un salpicadero muy parecido al que llevan los Focus. Toda la atención se centra en la pantalla multifunción de hasta ocho pulgadas con la última tecnología en conectividad, y en la instrumentación digital configurable de 12,3 pulgadas.
Como es normal en el segmento, el Kuga podrá equipar de un selector de modos de conducción con varios programas predefinidos: Normal, ECO, Sport, Nieve y Arena. También se podrá equipar un Head Up Display con seis pulgadas e información a color.
Otros elementos posibles en el nuevo Ford Kuga serán el control de crucero adaptativo, lector de señales de tráfico, sistema de sonido premium, techo panorámico deslizante, asientos y volante calefactables, faros Full LED, asistente al aparcamiento automático, portón automático y como novedad segunda fila de asientos deslizante.
La oferta de motores contará con el bloque 1.5 Ecoboost en gasolina con 120, 150 y 182 CV en combinación con una caja de cambios manual con seis relaciones o automática de ocho velocidades, y con tracción sencilla o total. Posee desactivación de cilindro central, de modo que puede funcionar exclusivamente con dos cuando no se requieren altos niveles de par/potencia. Para los que deseen mayores prestaciones estará el 2.0 Ecoboost con 250 CV.
La gama más frugal contará con un híbrido sencillo que combinará un bloque de 2,5 litros (ciclo Atkinson) con otro eléctrico que desarrollarán 225 CV e irá asociado a una caja automática de tipo CVT. El consumo de esta variante será de 5,6 L/100, un dato correcto dentro del segmento.
Los que quieran un PHEV podrán optar por una versión también con 225 CV que podrá recorrer unos 50 km en modo eléctrico gracias a una batería con 14,4 kWh de capacidad. Los dos híbridos no llegarán hasta el año que viene así que los datos son solo orientativos.
En cuanto a la oferta diésel, también se venderá el 2.0 EcoBlue Hybrid con 150 CV que responde a la última moda en micro-hibridación a 48v. De este bloque también se ofrecerá una opción «convencional» con 190 CV que declarará un consumo medio de 5,7 L/100, es decir, 0,7 L/100 más que el híbrido.
El nuevo Ford Kuga está previsto que llegue a los concesionarios durante el último trimestre del año y como el modelo actual se producirá en la planta de Almussafes en la Comunidad Valenciana. Los precios no han sido anunciados pero Ford suele ser competitiva.