En pocos días esta curiosa noticia que parecía sacada de un diario el Día de los Inocentes ha llegado a ocupar portadas de gran cantidad de medios en Italia. Y es que aunque pueda parecer una broma macabra es absolutamente real. Las autoridades italianas han frustrado recientemente una trama de una banda que tenía pretendía llevar a cabo el secuestro del cuerpo del mismísimo Enzo Ferrari para esconderlo en algún lugar de los Apeninos y pedir un rescate a la familia. El féretro de la leyenda del automóvil italiana está situado en Módena, esta banda organizada dedicada al tráfico de drogas y armas ahora pretendía ‘traficar’ con un bien mucho más preciado.
Según un comunicado de la policía italiana, descubrieron esta trama en el momento que investigaban dicha banda por otros delitos, esta organización con su base en Orgosolo (Nuoro) ha movilizado a un total de 300 efectivos entre policía y militares realizando un total de 34 arrestos en todo el país. Su plan era simple, robar el ataúd de Enzo Ferrari -fallecido con 90 años en 1988- para trasladarlo hasta un lugar secreto en los Montes Apeninos, y desde ahí contactar con la familia para pedir un cuantioso rescate. Incluso uno de los miembros de la banda ya había estado tanteando el lugar donde yace la tumba en el cementerio de San Cataldo, en Módena y pretendían utilizar dos vehículos y una furgoneta para dar el golpe.