Sin duda alguna se trata de una auténtica novela con venganzas, viejas rencillas y como no, la búsqueda de un daño al prójimo que vamos a ver si podemos explicar.
Tal y como os he comentado en el título, General Motors ha demandado a Fiat Chrysler Automobiles, acusándolo de sobornar a funcionarios sindicales para interrumpir las negociaciones de un convenio colectivo.
La demanda federal de crimen organizado ha sido presentada en los Estados Unidos contra FCA y varios ex ejecutivos de la firma que previamente fueron declararon culpables en una investigación de corrupción federal. En la demanda, General Motors afirma que FCA participó en una trama de corrupción que se extendió durante varios años y que pretendía dañar el proceso de negociación colectiva que por cierto dañó seriamente a GM.
General Motors afirma que FCA sobornó a funcionarios del sindicato United Auto Workers para interrumpir las negociaciones con GM sobre los acuerdos de negociación colectiva en 2009, 2011 y 2015. GM afirma que esta «manipulación del proceso de negociación colectiva» repercutió en unos mayores costes para la firma.
Desde la propia GM quieren dejar claro que las acusaciones buscan responsabilizar a FCA de los pasados daños causados a GM y de esta forma, garantizar un futuro terreno de juego nivelado, justo y equitativo.
FCA ha declarado que están asombrados por la forma, el contenido y el momento de presentación de la demanda y aseguran que lo que se busca con esta demanda federal es interrumpir las negociaciones y la fusión con PSA. Desde FCA confirman que están preparando la defensa y que actualmente están negociando un nuevo acuerdo de negociación colectiva de cuatro años con el sindicanto de trabajadores que a su vez está al tanto de las negociaciones con PSA.
Visto lo visto y ahora que conoces la historia, ¿cuales crees que son los motivos de la demanda?