¿Te imaginas que, simplemente mediante las luces LED que incorpora tu coche se pudiera transmitir información al resto de vehículos sobre el atasco más cercano o un accidente que se acaba de producir?¿O que fuera capaz de reconocer un semáforo en rojo y frenar? La tecnología LiFi que funciona mediante luces LED todavía está en desarrollo, pero se prevé que pronto llegue al mundo de la automoción, dando lugar a una auténtica revolución en el sector.
Vas conduciendo por la autopista cuando, de repente, un vehículo que circula en la dirección contraria envía mediante sus luces LED una señal a una de las cámaras que incorpora tu coche, te avisa del atasco que encontrarás más adelante y, por tanto, te ofrece la posibilidad de optar por una ruta más rápida. O imagina una situación en la que, ante un ligero despiste, no ves la brusca frenada del coche que circula frente a ti, pero sus luces traseras avisan del peligro a tu vehículo y éste frena inmediatamente, además de avisar al resto de vehículos que te rodean.
¿Cómo es posible?
Esta tecnología funciona mediante el LiFi -el próximo sustituto del WiFi, que es hasta 100 veces más rápido-, una forma de comunicación que trabaja de forma innovadora con la ayuda de luces LED. El LiFi, también conocido como “Visible Light Communications” (VLC) o “Comunicaciones por Luz Visible”, a diferencia del WiFi no actúa por ondas microondas, sino a través de la luz. De esta forma bastaría con instalar un modulador en cualquier bombilla LED para que, además de dar la luz habitual a la que estamos acostumbrados, también sea capaz de transmitir datos a gran velocidad.
Con estos moduladores, se consigue que las bombillas se enciendan y apaguen millones de veces por segundo -algo totalmente imperceptible a la vista humana-, creando los ceros y unos binarios. Los fotodiodos instalados en las cámaras de nuestro coche serían los encargados de recibir esa señal, y consiguientemente interpretarlos para convertirlos de forma instantánea en información.
¿Cuándo llegará a las calles?
Pese a estar en una primera fase experimental, las pruebas realizadas hasta la fecha auguran un futuro repleto de posibilidades, siendo la industria del motor la principal beneficiada de esta forma tan peculiar de comunicación.
En la actualidad, las luces LED son cada vez más habituales en muchos modelos, así como las cámaras -que por ejemplo utilizamos para aparcar o para tener una visión 360º- que necesita esta tecnología para recibir la información desde las bombillas del resto de vehículos. Gracias a esto se podría crear una red interactiva en tiempo real que sincronizase a todos los conductores alrededor de nuestro coche, recibiendo incluso desde avisos de tráfico hasta información de las propias señales o semáforos.
La tecnología LED en los vehículos pasaría de ser una simple forma de iluminación a un método de conectar simultáneamente todo el tráfico con lo que le rodea, e incluso una nueva forma de evolucionar hacia la conducción autónoma.
Desde grandes empresas como Intel, ya están trabajando en esta tecnología, “Prevemos enviar mensajes a través de las luces de tu coche que tus ojos no puedan ver” dice Richard Roberts, uno de los investigadores de dicha compañía. “Parpadeando hacia el exterior mensajes para ser utilizados por otros automóviles por razones de seguridad: posicionamiento, prevenir colisiones, conducción cooperativa, incluso algún día para una conducción autónoma”.
Robert ha sido parte de este proyecto desde que el fabricante de circuitos integrado comenzó con sus investigaciones sobre el LiFi -allá por el año 2008-, y desde entonces ven cada vez más cercano un futuro de ríos de información totalmente invisible para el ser humano, una red interactiva enorme. Mientras que otros han apostado por métodos de envíos de información mediante la luz visible cuando se escanea -como ocurría con los códigos QR-, otras grandes corporaciones solo ven posible un futuro donde el LiFi domine el panorama de la comunicación -junto con la desaparición no tan lejana del WiFi-.
Como ya he comentado, no solo se produciría un intercambio de mensajes entre vehículos, sino también entre estos y las farolas o semáforos que incorporasen esta tecnología LED, dando lugar a una enorme y compleja malla de dispositivos que enviarían todo tipo de datos. Quizás ya no solo sobre cuestiones relacionadas con el resto de vehículos, sino también sobre cualquier tipo de información que nuestro entorno nos quisiera enviar.
Como veis, es una tecnología repleta de posibilidades que alcanzaría límites nunca antes imaginados en el campo de la comunicación y a velocidades de vértigo.
Por el momento, el proyecto se encuentra aún en fase de desarrollo -dado que es una tecnología en una etapa de evolución muy temprana-, pero quién sabe si pronto podremos ponernos al volante de un coche totalmente inteligente, capaz de interactuar con nuestro entorno y advertirnos de todo tipo de acontecimientos y peligros que ocurran a nuestro alrededor sin que previamente tuviéramos noción de ello.
Carlos Fernandez Gutierrez
Nos estamos haciendo demasiado dependientes de estas tecnologias. No solo a nivel automovil, si no tambien en otros ambitos
Lifi,jajajaja,el.coche es para conducir no para vivir en el,ahora entiendo lo de la frenada automatica,dios que pena y que peligro de coches,todo lo necesario para distraerse y darse un tortazo,ufffff
Mark
Dejaros de gilipolleces, que estas mierdas cuando se estropean solo dan por culo
Amen
Eduardo Calvo-Rubio
A Opel no le gustará esta noticia.
🙂
Valdrá esto para el plan pive?
No van a saber como vender sus coches ahora ?
jajajajaja que bueno,
Los opel son como las impresoras Lexmark que si se te acaba la tinta, comprar la tinta te valia mas cara que comprar otra Lexmarkt nueva. (Repuestos opel)
Conductor de Opel:
– Flipa, mi coche tiene Wifi integrado!!
Conductor cualquiera:
– Pues el mío tiene LiFi 🙂
Los coches tienen que tener motor, pedales y volante, no wifi, ni lifi, ni ostias de esas.
4 años con lo mismo cada 3 meses una publicación de estas