El Cadillac Escalade llegó al mercado hace ya más de 20 años y, poco a poco, pasó de ser un GMC Yukon Denali modificado a convertirse en un verdadero símbolo de estatus estadounidense aceptado por todos, desde raperos hasta ejecutivos de negocios. Sin embargo, el SUV ha perdido parte de su brillo a medida que otras marcas de lujo han entrado en el segmento.
Cadillac vuelve a poner toda la carne en el asador con un Escalade completamente nuevo que es mucho más lujoso y está más diferenciado que su predecesor. Como ya sabíamos, ha sido desarrollado sobre la plataforma T1 de General Motors (GM), la cual da vida a las nuevas generaciones de los Chevrolet Tahoe y GMC Yukon.
También adopta la arquitectura eléctrica Global B de GM y admite actualizaciones automáticas, al tiempo que presenta una seguridad de red avanzada para tecnologías de conducción altamente automatizadas. Como gran novedad más allá de su tecnología encontramos una nueva suspensión trasera independiente que promete transformar la forma en la que se viaja.
El Cadillac Escalade saldrá a la venta a mediados de 2020 en América del Norte y visualmente se distingue por una nueva parrilla vertical de mayor tamaño, escoltada por faros horizontales. Las luces LED diurnas independientes de diseño vertical son un signo identificativo de la marca.
Tampoco faltan nuevos colores para la carrocería, detalles en negro para el nuevo acabado deportivo, diseños de llantas remozados en tamaño de hasta 22 pulgadas y una zaga con múltiples modificaciones en la que destacan las luces traseras verticales con «capas tridimensionales profundas y acabados con grabado detallado«.
El Escalade ha crecido en todas las cotas, ofreciendo una mayor habitabilidad y un espacio de carga sobresaliente.
Gracias a la nueva plataforma el espacio para las piernas en la tercera fila aumenta en un 40% (886 mm), mientras que el espacio de carga del maletero con esta fila montada crece también un 68% (722 litros). La capacidad total es de 3.089 litros y de 3.585 litros en la versión alargada ESV. Esta es 404 mm más larga y ofrece hasta 933 mm de espacio para las piernas en la tercera fila.
También hay una nueva suspensión adaptativa Air Ride que estará equipada en los acabados tope de gama. Ofrece nivelación de carga y ajuste de altura de conducción automáticos (carretera, off road, 4WD Hi, 4WD LO…), aunque el conductor podrá ajustar la altura del vehículo de forma manual en un rango de hasta 101 mm en función de las circunstancias.
Como se puede apreciar, el interior ha sido completamente renovado y la carga tecnológica es brutal. Destaca el conjunto para la instrumentación y el sistema de información y entretenimiento, que presenta una pantalla OLED curva de más de 38 pulgadas que tiene el doble de densidad de píxeles que un televisor 4K. Sí, como estarás imaginando, son en realidad tres pantallas.
A pesar de estar prácticamente unidas, podemos distinguir un grupo de instrumentos digitales con una pantalla de 14.2 pulgadas, un sistema de infoentretenimiento con otra pantalla de 16.9 pulgadas y un centro de información para el conductor con una tercera pantalla de 7.2 pulgadas que se encuentra a la izquierda del volante.
El Escalade viene de serie con un sistema de visión envolvente que utiliza cuatro cámaras para proporcionar una vista panorámica de los alrededores del vehículo.
Rematan el conjunto un Head-Up Display de 15 pulgadas, así como un paquete multimedia para los asientos traseros con pantallas táctiles de 12,6 pulgadas (320 mm) en diagonal. Tampoco faltan un punto de acceso WiFi, Apple CarPlay, Android Auto, puertos de carga USB, cargador inalámbrico, asistente de remolque y la navegación con realidad aumentada.
A nivel de asistencias para el conductor, cuentan con más de 30 tecnologías de seguridad que incluyen alerta de colisión frontal, frenado automático de emergencia, indicador de distancia de seguridad, detección de peatones delantera y trasera, asistencia de aparcamiento, control automático de faros delanteros IntelliBeam, conducción semi-autónoma asistente de carril activo y un largo etcétera.
Bajo el capó encontramos el poderoso motor V8 de 6.2 litros con 426 CV (313 kW) y 623 Nm que cuentan con Start/Stop, sincronización variable de válvulas y desactivación de cilindros. La nueva incorporación a la familia es un bloque turbodiésel Duramax de 3.0 litros que desarrolla 281 CV (207 kW) de potencia y 623 Nm de par. Se asocia a una caja automática de 10 velocidades.