Tras varias semanas viendo teasers, el Dodge Challenger SRT Demon por fin es oficial. Como ya sabrás, es uno de los muscle car más salvajes que existen en la actualidad, y a pesar de estar homologado para circular por carretera, todo su apartado técnico ha sido desarrollado pensando en arrasar en las clásicas carreras de aceleración por las que tanta predilección tienen al otro lado del Charco.
Para no aburriros demasiado, vamos a dar un repaso a los elementos y cifras clave del brutal modelo, porque lo cierto es que no tienen desperdicio. Desde sus neumáticos Nitto hasta el poderoso bloque HEMI Demon V8 de 6.2 litros con 840 CV (626 kW), todo en este deportivo ha sido pensado para arrasar en las drag race, y ojo, porque se ha convertido en el primer coche de producción en bajar de los 10 segundos en el cuarto de milla, deteniendo el crono en 9,65 segundos a una velocidad de 225 km/h.
Comenzaremos por la mecánica, y es que este propulsor 6.2 HEMI Demon V8 sobrealimentado es digno de mención al contar con un 50% de sus componentes específicos para la competición. Con 840 CV (626 kW) de potencia y 1.044 Nm de par motor, esta fiera cuenta con un techo de revoluciones más alto y la gran mayoría de sus componentes de nueva factura, tales como el cigüeñal, los pistones, las bielas, las válvulas o el supercargador, ahora con una capacidad de 2,7 litros que sopla a 14,5 psi. Su Air-Grabber es el mayor empleado en un coche de calle y la mecánica en uve aspira 0,54 metros cúbicos de aire por segundo.
El conjunto se remata con unos frenos aligerados, un ajuste de la suspensión adaptativa -amortiguadores Bilstein adaptativos- para maximizar la transferencia de potencia a las ruedas traseras y la instalación de múltiples componentes de alta resistencia.
Para que os hagáis una idea, es capaz de alcanzar los 96 km/h desde parado en solo 2,3 segundos gracias a los sistemas de su innovador sistema Launch Control con ‘Transbrake’, que permite un mayor flujo de aire a través del motor antes de lanzar como un misil al SRT Demon, con un aumento de las revoluciones simultaneo sin que el par sobrecargue los frenos y los neumáticos. El mismo se pone en marcha con el modo Launch Control activado y a partir de las 1.000 rpm, provocando dos efectos sobre la mecánica: cierra la válvula bypass del compresor y gestiona el flujo de combustible a los cilindros, alterando la sincronización de la explosión.
Por otra parte, recordemos que tendremos a nuestro alcance un sistema para seleccionar el combustible del vehículo, el cual cuenta con una bomba doble para permitirle funcionar con combustible de 91 octanos estándar o de más de 100 octanos, lo que lo convierte en el primer modelo de producción con dicho modo. Dodge asegura que la mezcla de ambos combustibles de diferente octanaje no va a dañar en ningún momento su potente V8 de 6.2 litros sobrealimentado, ya que la función de alto octanaje no se activará si el combustible de octano es demasiado bajo.
Toda la potencia se transmite al eje trasero a través de una caja de cambios TorqueFlight 8HP90 automática de ocho velocidades que ha sido reforzada con acero de alta resistencia y aluminio A383. Cuenta con una nueva desmultiplicación en el convertidor de par que transmite un 18% más de par que la transmisión del SRT Hellcat ‘estándar’ con 717 CV.
El funcionamiento de los vehículos con este tipo de combustibles de alto octanaje nos permite una mejor compresión dentro del motor, cuanto más alto sea este más se comprimirá la mezcla y aprovecharemos mejor el poder energético de la gasolina. Desgraciadamente solo podremos encontrarlo en gasolineras especializadas y muy selectas, que según Dodge permitirá al conductor observar grandes cambios en un corto periodo de tiempo. Adicionalmente, monta un retardador de apagado, que mantiene el ventilador y la bomba del intercooler funcionando después de apagar del motor hasta que se alcanza una temperatura idónea de refrigeración –After-Run Chiller-.
Respecto a los neumáticos, el Challenger SRT Demon está equipado con unas impresionantes llantas de 18 pulgadas y unos neumáticos Nitto NT05R en dimensiones 315/40R 18. Estos nuevos neumáticos radiales de alta fricción miden 12.6 pulgadas de ancho (320 mm) y han sido diseñados y desarrollados específicamente para el Dodge Challenger SRT Demon usando un compuesto nuevo y una construcción única. La capacidad de tracción mejorada y el perfil más alto de estos neumáticos permiten al Challenger SRT Demon soportar grandes cifras de par, por lo que Dodge ha decidido ofrecer más multiplicación de par en el modelo. Estas mejoras por sí solas permiten al Challenger SRT Demon generar un 35 por ciento más de “fuerza de lanzamiento” que un Challenger Hellcat.
Hay 14 colores exteriores disponibles: B5 Blue, Billet Silver, Destroyer Grey, F8 Green, Go Mango, Granite Crystal, Indigo Blue, Maximum Steel, Octane Red, Pitch Black, Plum Crazy, TorRed, White Knuckle y Yellow Jacket.
Por otra parte, el Dodge Challenger SRT Demon también es el primer coche de producción que cuenta con un sistema que emplea el sistema de climatización para refrigerar el aire del motor –sistema SRT Power Chiller-. Los métodos de enfriamiento convencionales consisten simplemente en usar aire o refrigerante para reducir la temperatura. Cuando está en modo Drag, el sistema de aire acondicionado interior del Challenger SRT Demon se desvía para enfriar el sistema de refrigeración del motor. El resultado: Hasta 45 grados Fahrenheit de reducción en la temperatura del aire de admisión lo que vienen siendo unos 7 grados centígrados.
Por último, merece la pena mencionar el sistema Uconnect de 8,4 pulgadas ubicado en el centro del panel de instrumentos. Este cuenta con visualización gráfica en tiempo real de la potencia del motor y el par, los niveles de potencia pueden ser almacenados para realizar un seguimiento de las mejoras que se producen con la instalación de los Direct Connection Performance Parts, visualización en tiempo real de la temperatura del refrigerante del intercooler, cronómetros para medir el tiempo de reacción; 0-60 mph, 0-100 mph, 1/8 de milla, el 1/4 de milla y la velocidad del vehículo, visualización de las fuerzas g laterales y longitudinales instantáneas, indicador de lectura de la presión y temperatura del aceite del motor, temperatura del refrigerante, temperatura del fluido de la transmisión, temperatura del aire de admisión, relación aire-combustible, temperatura del refrigerante del intercooler y voltaje de la batería.
Con el registrador de datos, los conductores del Demon pueden contar con un archivo de datos para ayudar a optimizar el coche así como mejorar las técnicas de conducción.
Además, los conductores también podrán optar por tres modos: Auto (Street), Drag y Custom:
Opciones de modo automático (calle):
– Múltiples niveles de rendimiento del motor
– Tres niveles de suspensión “feel y response”
– Tres niveles de dirección “feel y response ”
Opciones Drag Mode:
– Múltiples niveles de rendimiento del motor
– Un nivel de transmisión que cambia “velocidad y firmeza”
– Un nivel de control de tracción
– Un nivel de suspensión “feel y response ”
– Un nivel de dirección “feel y response ”
Opciones de modo personalizado:
– Se trata de un modo 100% configurable
Opcionalmente, también está disponible el paquete Demon Crate, el cual contiene componentes que desencadenan el potencial del modelo en la pista y permite personalizar este muscle car con el nombre del comprador, el número de VIN y el número de serie.
No bastaba con el hellcat ahora el demon