En el stand de Volkswagen del Salón del Automóvil de Detroit 2017 podrás encontrarte el nuevo Atlas, el Tiguan Allspace o el I.D. Buzz Concept, pero lo que no verás son a muchos directivos del gigante alemán pululando por allí. Sí, el motivo es precisamente el que te imaginas, el polémico ‘Dieselgate’, el cual se ha cobrado recientemente otra víctima como parte de la investigación llevada a cabo por las autoridades estadounidenses.
El pasado sábado, el FBI detenía en Florida al que fuera el responsable de Compliance (Oficina de Cumplimiento de Normativas) del consorcio automovilístico germano en Norteamérica entre 2014 y marzo de 2015, Oliver Schmidt. Concretamente, se le acusa de una posible conspiración para defraudar en relación con el caso del software que alteraba las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) de algunos modelos diésel del grupo, según indicaron dos fuentes cercanas a la operación al diario The New York Times.
Mientras que Schmidt es procesado en Detroit (Michigan), Jeannine Ginivan -la portavoz de Volkswagen- indicó que su compañía continúa cooperando con el Departamento de Justicia de Estados Unidos, pero la denuncia es clara: «el señor Schmidt trató de engañar y confundir a los reguladores de Estados Unidos, aportando motivos de discrepancia acerca de que Volkswagen estaba engañando intencionadamente en las pruebas de emisiones de sus vehículos a fin de conseguir que la compañía pudiese seguir vendiendo vehículos diésel en el territorio«.
Lo más curioso es que VW incrementó en 2016 las ventas un 2,8%, hasta 5,99 millones de unidades en comparación con 2015. El director de Ventas de la marca, Jürgen Stackmann, se muestra satisfecho con dicho resultado y optimista de cara a 2017, un año en el que se lanzarán nuevos productos en todas las regiones.
Como bien sabéis, esta detención se ha producido en el marco de las negociaciones entre Volkswagen y el Departamento de Justicia de Estados Unidos, tan solo unas semanas después de que el acuerdo por el bloque 3.0L TDI V6 empiece a tomar forma y más de un año después de que el grupo alemán admitiera que hay alrededor de 475.000 vehículos con el motor diésel TDI de 2.0 litros afectados por el caso del software que alteraba las emisiones en los Estados Unidos.
Micki Michino
Me veo a los del CSI rebañando escapes de los VAG
Jajajajaja
Oooo
En estados undidos no se andan con chiquitas
En Europa estan como en su cortijo
Aqui no pasa na, pero alli están locos por meterles mano
En Estados Unidos no les importa la contaminación, sólo les interesa el dinero. Hay unos límites de contaminación, ah pero si pagas puedes contaminar más. Mucho postureo americano