Las estrictas normativas anticontaminación, los elevados precios de los carburantes y la posibilidad – por remota que parezca – de que el petróleo se acabará en un tiempo que a pesar de lo que digan los expertos, no puede ser determinado a ciencia cierta, están haciendo que en los últimos años, el número de combustibles alternativos de origen natural se haya multiplicado.
Hoy nos hemos enterado de que un nuevo estudio confirma que el café puede emplearse para la obtención de biocombustibles, ¿curioso?.
¡Alto!, no enciendas la cafetera aun y lee…
Los científicos de la Universidad de Bath han publicado un estudio en la revista Energy Fuels en el que se muestra que los residuos originados por el café junto con disolventes orgánicos, pueden generar biocombustible.
El proceso para transformar el café en combustible parece sencillo. Extraer el aceite de los posos del café desechados y mezclarlo con un disolvente orgánico en un proceso llamado «transesterificación», genera biocombustible.
Con 10 kg de posos pueden conseguirse entorno a los 2 litros de biocombustible. Puede parecer una barbaridad, pero como alternativa minoritaria no parece descabellado.
¿Os imagináis?, las cafetería o bares podrían vender lo que hoy en día tiran a la basura o alimentar sus propios vehículos con biocombustible.
A diferencia de otros biocombustibles, esta alternativa no necesita cultivos especiales o gastos extra por lo que se presenta como una de las alternativas de creación de biocarburantes más atractiva del mercado.
Durante mucho tiempo nos hemos centrado en que los automóviles funcionen con combustibles fósiles, pero a medida que nuestros recursos se están agotando, la gente está empezando a cambiar sus puntos de vista.
A continuación os dejo otro método diferente al que os hemos hablado pero que emplea café para generar combustible.
Los pellets generados a partir de la paja que se desprende de los granos de café durante el proceso de tostado se calientan y generan monóxido de carbono e hidrógeno. Después de enfriar y filtrar el hidrógeno, este se emplea en el motor de combustión interna transformado.
Martin Bacon, dice que el coche del vídeo puede recorrer 88 km con 10 kg de pellets derivados de café.
https://youtu.be/V_RFvZnbpHk
mientras no me joda el motor… todo lo que sea mas barato que el oro liquido me vale 😉