Si el Spacetourer tiene la misión de complicarle las cosas al Multivan de Volkswagen, el nuevo Jumpy hará la propio con los Transporter y Caravelle del fabricante alemán. Para ello Citroën no ha escatimado en recursos, ofreciendo un producto muy completo en todos los aspectos.
Si bien el concepto general es muy parecido al del Spacetourer, en el Jumpy los acabados están en un escalón inferior para contener los precios y hacerlo más asequible. Además las versiones básicas tendrán una menor dotación, dejando que sea el cliente el que decida qué elementos necesita.
La oferta mecánica estará formada por el 1.6 BlueHDI que podrá pedirse con 95 y 115 CV de potencia. Si bien es un escalón inicial correcto, serán más interesantes los 2.0 BlueHDI con 150 y 180 CV dadas sus mejores prestaciones y posibilidades en caso de ir a tope de carga. El más potente tendrá siempre una caja automática de seis velocidades.
Para adaptarse a las necesidades de cualquier cliente, el Jumpy se venderá con tres longitudes diferentes de 4,60 metros, 4,95m y 5,30 en el caso del XL. La altura es bastante contenida en los dos más pequeños para que puedan entrar en la mayoría de parkings públicos y privados (1,9 metros).
Como buen comercial de este tamaño se podrán elegir carrocerías furgón, combi, mixto y otras tantas realizaciones especiales que podrán solicitarse bajo pedido. La capacidad del habitáculo podrá alcanzar las nueve plazas distribuidas en tres filas de asientos.
Según el comunicado en el mejor de los casos la capacidad de carga alcanzará los 6,6 metros cuadrados, con un peso máximo autorizado de 1.400 kg. El nuevo Jumpy está desarrollado sobre la nueva plataforma EMP2 y llegará a los concesionarios a lo largo del próximo verano.