Como muchos de vosotros sabreís, el Fisker Karma es el primer vehículo producido por la marca norteamericana. Un modelo que contará con tecnologías actuales para así, intentar reducir lo máximo posible el consumo de combustible sin perder una pizca de deportiva, ya que cuenta con nada menos que 409cv.
Esos 409cv proceden de un sistema eléctrico que permite recargar las baterías de diferentes modos. El primero y el más conocido, a través de un enchufe convencional, el segundo gracias a un generador de gasolina y el tercero y más barato, aprovechando la energía que se desperdicia en la frenadas ( Brake regeneration ) .
Cuenta con una autonomía eléctrica de 52Km, pero en caso de quedarnos sin un electrón en las baterías, podremos quemar combustible para recargarlas y seguir continuando nuestro viaje. Homologa un consumo de 4.5 Litros/100km, una cifra sobresaliente para contar con 409cv bajo el pie derecho y tener que desplazar casi 5 metros de coche.
Si empezamos a contar el consumo de gasolina desde que arrancamos el motor térmico hasta que recorremos 100Km con él encendido, el Karma pasar a gastar 11.6Litros/100Km, una cifra que ya no está tan bien como la primera. Este motor ( térmico ) tiene 2 litros de cilindrada, turbocompresor, cuatro cilindros y produce nada menos que 260cv, de ahí ese consumo y es que por muy híbrido que sea, 260cv son muchos caballos.
En modo conjunto, la autonomía aumenta hasta los 480Km, momento en el que tendremos que parar a repostar para poder seguir con nuestro viaje.
Sus prestaciones están a la altura de la potencia generada por los dos motores eléctricos. Acelera de 0 a 100Km/h en 5.6 segundos y su velocidad máxima queda reducida a los 200Km/h. Todos esos datos, son posibles gracias al modo Sport, ya que en el modo habitual las prestaciones se reducen considerablemente.
Un concepto de coche muy similar al Opel Ampera o Chevrolet Volt, pero con mayores lujos y un precio de casi 88.000$ en EEUU.