En septiembre de 2009, Audi presentó el modelo E-tron como un deportivo de altas prestaciones eléctrico 100%, con 313 CV, y una aceleración de 0 a 100 en 4,8 segundos.
Pero semejante elemento de la conducción no podía construirse en cualquier lugar, y no fue hasta junio de 2010 cuando se decidió que la planta Quatrro GMBH en Neckarsulm, sería la elegida por su dedicación y experiencia en pequeñas y exclusivas series como el R8.
Elegido el lugar, sabemos que su fabricación, para aquellos bolsillos más exigentes, se llevará a cabo a finales de 2012.
Para su laboriosa manufactura ya se han seleccionado a los empleados más cualificados y experimentados de Audi que cuentan con experiencia en la línea de producción del exitoso R8.
La construcción ligera sistematizada es una de las precondiciones clave para la eficiencia y la autonomía en los coches eléctricos. La carrocería es de aluminio y, gracias a la tecnología Audi Space Frame (ASF), su peso apenas supera los 200 kilos. Es importante el tema de la carrocería ligera ya que el R8 e-tron pesa sólamente 1.600 kilos.
El R8 e-tron también recibe el mismo proceso de revestimiento que el modelo que se produce en serie. «El proceso de producción está diseñado de manera que podamos aprovechar las sinergias con el Audi R8 de serie», explicaba Frowein.
AUDI AG invertirá más de 5.000 millones de euros, entre 2011 y 2015, en las dos plantas alemanas de Ingolstadt y Neckarsulm, con el propósito de desarrollar nuevos productos como el sistema de propulsión híbrida y eléctrica.
Mientras esperamos a ver uno, difícilmente por nuestro barrio, podemos deleitarnos con unas fotografías del mismo.