Lo pudimos ver al acecho en una de las imágenes oficiales del renovado GLK por lo que era cuestión de tiempo que Mercedes-Benz presentase el Clase G 2013. Ya está aquí, es real y viene más juvenil y moderno que nunca. Lo podremos ver por primera vez en el Salón del Automóvil de Pekín donde nos será difícil encontrar las diferencias exteriores pero en el interior y en su mecánica todo cambia.
EXTERIOR E INTERIOR
Desde que se lanzara en 1979 el primer Clase G la marca de la estrella lo ha ido rejuveneciendo poco a poco, sin grandes cambios. Mercedes no encontró ninguna razón para alterar la apariencia exterior del todoterreno por excelencia así que todo sigue casi igual. Lo mismo le pasa al Defender de Land Rover. Tras 33 rodando por nuestras carreteras los cambios más importantes en la carrocería son las luces de tipo LED. Para las variantes AMG se ofrecen unas llantas de 20 pulgadas, una parrilla con tomas de aire de gran tamaño y un paragolpes de mayores dimensiones.
El interior es otro mundo. El lujo, el confort y la línea de Mercedes se plasman en esta Clase G. La intrumentación parece haber sido sacada de un ML, pero preparado para el campo. Una consola central con nuevos controles y una gran pantalla a color para el sistema COMAND es lo más destacable y moderno. El diseño del volante, que incorpora diversos controles también es nuevo.
El equipamiento opcional ahora es mucho más rico. Se ha introducido algunos sistemas de seguridad como el DISTRONIC PLUS, Blind Spot Assist, el asistente de aparcamiento Parktronic y el ESP que ahora incluye función de estabilidad de remolque y bloqueo.
MECÁNICAS
En Mercedes-Benz no solo han pensando en rejuvenecer esa mirada antigua también han introducido motores de última generación listos para afrontar cualquier dificultad campera que otro todoterreno no pueda superar. La gama se compone desde propulsores V6 diésel con 211cv hasta potentes fieras V12 gasolina con más de 620.
El motor de acceso será un bloque diésel V6 con 3.0 litros de cubicaje denominado 350 BlueTEC. Ofrece 211cv de potencia y homologa un consumo medio de 11.2Litros/100km. Supera la normativa de emisiones Euro 5 gracias a una solución acuosa de urea denominada AdBlue, que disminuye las emisiones de óxidos de nitrógeno y gases contaminantes.
En el siguiente escalón nos encontramos un propulsor gasolina V8 de 5.5 litros de cubicaje capaz de ofrecernos unos interesantes 388cv de potencia.
Ahora llega lo gordo, los AMG. Dos impresionantes motores con estructuras diferentes llegan a la Clase G por primera vez juntos en su historia. El primero ha sido denominado 63 AMG, algo que tiene poco sentido ya que bajo el capo nos encontramos un V8 de 5.5 litros sobrealimentado mediante dos turbocompresores y acompañado de sistema de parada y arranque automático Start&Stop. Con este tendremos disponibles un máximo de 544cv mientras que en el V12 Biturbo la potencia se eleva a un grado superior. 620cv es lo que homologa el G 65 AMG.