El pasado Salón de Los Ángeles (noviembre de 2016) fue el escenario elegido por la firma de Stuttgart para darnos a conocer el nuevo Porsche 911 RSR 2017, la mayor revolución del modelo en sus más de cuarenta años de historia. Como sabrás, las siglas RSR definen a los GT de Porsche más evolucionados para la competición, y en esta ocasión no iban a ser menos, con un replanteamiento completo del vehículo en su estructura, desde la configuración de suspensiones a la aerodinámica, pasando por la carrocería o el diseño de la transmisión.
Esta versión solo apta para la pista participará en la temporada automovilística 2017 y podéis dar por hecho que no dejará indiferente a nadie, pues aprovecha íntegramente las posibilidades de la reglamentación GT para las 24 Horas de Le Mans y cuenta en sus entrañas con el ultramoderno motor bóxer de seis cilindros que está situado por delante del eje trasero para alojar en la zaga un difusor de grandes dimensiones que aumenta la carga aerodinámica y mejora la velocidad de paso por curva; equilibra el reparto de pesos y mejora el comportamiento y el desgaste de los neumáticos.
Para situar al 911 RSR 2017 en la cresta de la ola, los ingenieros de Porsche Motorsport han añadido a esta mecánica de cuatro litros extremadamente ligera nuevos elementos como la inyección directa de combustible y un árbol de levas con accionamiento fijo, haciéndole destacar con ello por su excepcional rendimiento y eficiencia. Según afirman, numerosos componentes han sido diseñados desde cero, como la suspensión, la estructura de la carrocería, el concepto aerodinámico, la transmisión y el salvaje alerón trasero, derivado del Porsche 919 Hybrid.
Dependiendo del tamaño de la brida de admisión, la nueva mecánica atmosférica ofrece alrededor de 510 caballos de potencia (375 kW). Las levas del cambio, situadas en el volante, actúan sobre la caja secuencial de seis velocidades con carcasa de magnesio para pasar la potencia a las ruedas de 31 centímetros de ancho del eje trasero -30 centímetros en el delantero-.
Curiosamente, en este modelo de competición tampoco faltan algunos sistemas de asistencia vanguardistas, equipando un sistema de alerta para prevenir colisiones basado en un radar –Collision Avoid System-, luneta calefactada, un nuevo concepto de barras antivuelco y un nuevo asiento de competición con una fijación sólida. Ahora son los pedales los que se pueden mover y ajustar a gusto del piloto. Si todo va según lo previsto, tras su debut se estrenará en las 24 Horas de Daytona en enero de 2017 para, posteriormente, competir en la IMSA WeatherTech SportsCar Championship, la FIA World Endurance Championship, la European Le Mans Series o la Asian Le Mans Series, entre otros.
Increible. Un 4 litros atmosférico con más de 500 CV. Creo que aún hay esperanzas para un mundo de gasolina sin turbos ni compresores, ni intercolers ni demás gaitas. Porsche y Mazda se merecen un gran reconocimiento.