Después de los problemas con el Porsche GT3, la marca de Stuttgart vuelve a reportar incidencias en otro modelo.
En esta ocasión, la campaña de revisión se ha llevado ligeramente en secreto y ha afectado a unas 50 unidades en todo el mundo. Por lo visto, el Porsche 918 Spyder, el superdeportivo híbrido enchufable ha tenido algunos problemas –según la Administración Nacional de Seguridad Vial de Estados Unidos, NHTSA – en los brazos de control del eje trasero.
Durante unas pruebas de resistencia, durabilidad y calidad de Porsche en el circuito italiano de Nardo, la marca reportó problemas de rotura en este elemento del sistema de suspensión del vehículo.
Los vehículos afectados pueden haber sido fabricados con brazos de suspensión defectuosos en el eje trasero que pueden causar problemas de control en el vehículo.
Si se rompen los estos brazos, el conductor puede perder el control del vehículo, aumentando el riesgo de un accidente.
Porsche dice que no tiene conocimiento de ningún accidente, lesión o muerte vinculada con el problema.
El fabricante de automóviles emitió un orden el 18 de julio mediante la que se cancelaban las ventas del modelo hasta resolver el problema aunque esta orden ya ha sido anulada a día de hoy.