Está claro que hay muchos vehículos comercializados en Japón que nos encantaría poder adquirir en Europa. Sin embargo el nuevo Toyota Roomy no será uno de ellos dado que por estilo y concepto no se ajusta a los gustos locales, salvo algunas lógicas excepciones.
Muy cuadrado en sus formas, esta caja con cuatro ruedas presume de una gran superficie acristalada y un formato a medio camino entre un monovolumen y una furgoneta. La aerodinámica queda muy lejos de ser una de sus virtudes pero dado su enfoque urbano no debería ser un problema.
Con cinco plazas y un interior bastante configurable, el Roomy sí presume de estar bien aprovechado. Además el equipamiento disponible nada tiene que envidiar a segmentos superiores, destacando las puertas deslizantes eléctricas, faros LED, alerta de cambio de carril, acceso y arranque sin llave, aviso pre-colisión, frenada de emergencia, climatizador, etc.
La oferta de motores se limita a un nuevo 1.0 Turbo con tres cilindros que según Toyota disfruta de la potencia/prestaciones de un 1,5 litros pero con consumos más bajos. El cambio siempre automático de tipo CVT mientras que la tracción puede ser delantera o total.
Para poder agradar a todos los usuarios, Toyota propone el Roomy también en versión Tank en el que se han modificado algunos elementos de su carrocería como el frontal o los pilotos, cambiando totalmente su enfoque. El interior se mantiene en líneas generales pero también se adapta a otro tipo de cliente.
Llego el nissan cube, que ya fue suficiente
K cosa mas fea
Y el kia soul