El Volkswagen Beetle es un modelo con mucha carga emocional y durante unos años fue un vehículo de elevada demanda capaz de hacer girar cabezas a su paso. Actualmente está viviendo una etapa menos comercial, con ventas a la baja y la firma alemana ha decidido darle un pequeño impulso.
Para lograr captar la atención del público lo primero que han realizado es un pequeño lavado de cara en los niveles de terminación más sencillos que asemeje su aspecto a los más atractivos R-Line. Estrenan paragolpes y difusor inferior, con tomas de aire más grandes y un aspecto muy mejorado.
En el habitáculo la plancha central del salpicadero puede pedirse en varios colores, la instrumentación recibe una nueva iluminación en blanco más agradable y se ha incorporado luz LED ambiental configurable. La oferta de tejidos y tapizados también se enriquece con más combinaciones de color, dejando al usuario que pueda personalizar su Beetle a medida.
La oferta de motores se mantiene invariada, arrancando en gasolina con el 1.2 TSI de 105 CV con cambio manual o DSG con siete velocidades. En un escalón intermedio se sitúa el 1.4 TSI con 150 CV (6MT y 7DSG) mientras que como tope de gama está el 2.0 TSI con 220 CV.
En diésel siguen a la venta los 2.0 TDI con 110 CV con cambio manual o DSG, y el más interesante 2.0 TDI con 150 CV también con las dos cajas citadas y que destaca por su excelente relación entre prestaciones y consumos, declarando una media de sólo 4,5 L/100.
Mariona Alarcon
ohhhhh és una passada de cotxee!!! merciii per etiquetarme 😛
A ver si vuelve el amarillo Diana Martinez
Chiiii????