En su día, este mastodonte para surcar dunas se convirtió en el Mercedes-Benz más grande y más caro del catálogo de la marca. Alcanza los 5,86 metros de largo, más de dos metros de ancho y los 2,2 metros de alto, con un precio de casi 500.000 euros. El vehículo es una brutalidad no solo por su tracción a las seis ruedas, sino por su imponente motor, un V8 Biturbo de 544 caballos y 750 Nm asociado a una caja de cambios 7 G-tronic que envía la potencia a las seis ruedas.
Básicamente, el conjunto de propulsor y transmisión permite al modelo alcanzar cifras que ya le gustaría a algunos pseudo-deportivos, pues acelera de 0 a 100 km/h en poco más de 6 segundos, llegando a alcanzar como velocidad máxima los 160 km/h. El G63 AMG 6X6 se convierte así en el más polivalente de la gama G, con una superficie de carga jamás vista y una masa de más de 3,7 toneladas, ahí es nada….
El modelo fue diseñado para surcar dunas, nieve… Vamos, cualquier obstáculo que pudiera ponerse por delante de sus gigantescas ruedas de 37 pulgadas y sus tres bloqueos del diferencial, sin embargo, hoy el usuario de instagram Greg B., orgulloso propietario del Mercedes-AMG 6×6 que aparece en el vídeo, ha descubierto que no es oro todo lo que reluce y nos sorprende con el modelo encallado en la nieve. ¿Lo mejor de todo? Que incluso la oruga que fue a sacarlo tuvo problemas para llevar a cabo su labor.