¿Quién no se ha escapado alguna vez una noche de locura a las Fallas de Valencia y se ha vuelto al día siguiente? ¿Una noche romántica viendo las estrellas con tu chico/chica tubados en la ‘furgo’ quizás? Seguramente te hayas planteado esta pregunta en más de una ocasión, tanto si eres el propietario de una caravana/autocaravana como si has hecho alguna escapada exprés con tus amigos o tu pareja.
Normalmente el desconocimiento de la normativa nos lleva a pensar que esta práctica es ilegal y que pueden multarnos por ello, pero la respuesta es, así a bote pronto: Sí, puedes dormir en el coche, aunque es necesario que maticemos algunos detalles al respecto y, ya de paso, le echemos un vistazo a algunos consejos prácticos si vamos a optar por utilizar nuestro coche como «tienda de campaña».
Dormir en el coche: estacionar no es lo mismo que acampar
Como bien sabrás, puedes estacionar tu vehículo en cualquier lugar en el que esté permitido hacerlo, y en este caso toda la controversia a la hora de evitar ser sancionado reside en la diferencia entre acampar y estacionar para pernoctar. Lo que has de tener claro es que, si tu vehículo está correctamente estacionado, estás cumpliendo con la normativa nacional sobre tráfico, y puedes dormir, escuchar música, fumar o comer en él sin ser multado.
El interior del coche es un espacio privado, es como si un camionero duerme dentro de su camión. Nadie te impide que a tu furgoneta le quites los asientos, los dejes en casa y en su lugar pongas un colchón, siempre y cuando no se considere que estás acampando. Se considera que un vehículo está estacionado y no acampando cuando:
- Sólo está en contacto con el asfalto a través de las ruedas, es decir, no hay objetos en el perímetro exterior del vehículo que toquen el suelo como pudiera ser un toldo de tipo pérgola o patas estabilizadoras en una autocaravana. Sí que está permitido el uso de calzos en las ruedas, pues son considerados elementos de seguridad. Es más, son obligatorios en vehículos de más de 3.500 kilos de MMA (Masa Máxima Autorizada) si la inclinación es sensible, según el artículo 92.3.c) del Reglamento General de Circulación.
- El vehículo respeta las medidas de la ficha técnica, es decir, no cuenta con un toldo desplegado, una ventana abatible hacia el exterior, no hemos colocado mobiliario en el asfalto… Por el contrario, sí que se permite tener abierto un techo elevable o una claraboya, igual que en un turismo puedes abrir el techo si lo equipa.
- No se produce ninguna emisión o fluido ni se molesta con ruido. Si no tiras desperdicios a la vía pública, ya sean contaminantes o no (salvo los propios de la combustión del motor a través del tubo de escape) ni molestas al resto de usuarios, no estarás haciendo nada ilegal.
Si vas a dormir en una autocaravana sí que debes de tener más cuidado, porque son muchos los ayuntamientos que cuentan con ordenanzas municipales que prohíben estacionar caravanas y autocaravanas en los centros urbanos. Realmente, no debería de ser así y puedes recurrir la multa si te sancionan, ya que la Instrucción 08/V-74 establece que estacionar una autocaravana no equivale a acampar.
¡OJO! En España hay muchos parques nacionales en los que la regulación es distinta y se prohíbe expresamente dormir en el coche de cualquier forma, por lo que si tienes pensado hacerlo te recomiendo que le eches antes un vistazo a la normativa específica del parque.
Habitualmente hay señales que indican esta prohibición, pero nunca está de más ir sobre seguro para evitar que una multa nos amargue la excursión. También pueden sancionarte en lugares que están regulados por la Ley de Costas.
Dormir en el coche: algunos consejos
Ten en cuenta que un turismo convencional no está pensado para descansar durante ocho horas, sin perjuicio de que podamos echar una cabezadita en su habitáculo o incluso pasar la noche en un momento dado. En caso de que por gusto o necesidad vayas a optar por dormir en el coche, aquí van unos consejos:
- En función del coche, elige bien dónde dormir: Los asientos delanteros pueden desplazarse hacia detrás y reclinar su respaldo, así que resultan una opción sencilla que, además, te permite estar cerca del volante ante un imprevisto. Las plazas traseras, por su parte, te permiten acostarte longitudinalmente, pero te obligan a tener las piernas flexionadas. Un recurso útil si tienes una esterilla de goma como la de las tiendas de campaña es abatir la segunda fila de asientos y aprovechar el maletero.
- Cuidado con el cuello: Una mala postura puede jugarnos una mala pasada en el cuello y originarnos mucho dolor, por lo que nunca está de más llevar en el coche una almohada hinchable de viaje para las cervicales, de esas que envuelven el cuello sujetando la cabeza.
- Vigila la temperatura: Un coche al sol es un horno, especialmente en verano, por lo que trata de encontrar un sitio donde corra el aire y baja un poco las ventanillas. Si no te importa gastar algo de combustible, puedes dejar el motor encendido y poner el aire. Igualmente, en invierno puedes poner durante un rato la calefacción para estar más agusto, pero intenta cubrirte la garganta, que es la parte más vulnerable.
- Privacidad: Un recurso sencillo si queremos algo de privacidad a la hora de dormir o incluso que no nos moleste la luz del sol, es poner camisetas, toallas o bolsas de basura sujetas por la ventanilla. Eso sí, deja la tela por dentro, no sea que pase algún gracioso…
- Echa el pestillo y no dejes nada fuera del vehículo, hay mucho amigo de lo ajeno allí a donde vayas.