La carrocería más polivalente de toda la familia M acaba de recibir una serie de modificaciones para ofrecernos un ligero lavado de cara, en el que realmente lo único destacable respecto a la versión anterior es el nuevo frontal que ha recibido procedente de su hermano mayor, el BMW M4. Como se puede ver en las imágenes de la galería, los cambios son mínimos en el nuevo BMW M3, y es que desde la compañía teutona apuestan por no tocar demasiado lo que funciona…
En mayo del 2015 recibía su primer lavado de cara, en el que básicamente modificaba sutilmente sus faros traseros para adaptarse a la evolución del resto de la familia BMW. Ahora más de un año más tarde la principal novedad que trae consigo esta actualización es el nuevo diseño de los faros delanteros con tecnología LED, estos ahora ofrecen un apariencia renovada y más deportiva para la berlina. Como podemos ver en las imágenes ahora las líneas de LED conectan directamente con la rejilla frontal, un ligero cambio que muchos apenas notarán.
Debajo del capó no encontraremos ninguna mejora o actualización, seguiremos teniendo un motor V6 en línea biturbo de 3.0 litros que desarrolla la cifra de 431 CV, esta potencia está disponible entre 5.390 y 7.000 rpm. De forma opcional podremos equipar el «Competition Package» que ascenderá esta cifra de potencia hasta los 450 CV y nos permitirá acelerar de 0-100 km/h en tan sólo 4 segundos, siempre claro, que equipemos la caja de doble embrague y siete velocidades.
En resumen, un lavado de cara sutil que pretende mantener el modelo de la familia M en la misma línea visual que sus hermanos. Se espera que BMW desvele pronto un BMW M4 CS más potente a finales de este mismo año, que probablemente será muy similar al BMW M4 GTS.