El sector del caravaning va viento en popa y buena prueba de ello es el importante aumento de las ventas en nuestro país durante los dos últimos años. Hablamos del país europeo donde más crece proporcionalmente este sector, pues en España las autocaravanas son ya son la oferta de ocio vacacional en contacto con la naturaleza más demandada.
Por otra parte, las furgonetas camperizadas son las que mayor relevancia están cobrando en los últimos años, especialmente gracias a que ya no tienen limitaciones de circulación y cada vez son más las opciones que salen preparadas de fábrica, sin necesidad de acudir posteriormente a especialistas externos que instalen todo lo necesario para hacerla habitable.
Ya estamos en pleno verano y muchos de los clientes de este tipo de vehículos acaban de recibir su preciado hogar de vacaciones, pero probablemente pocos sean tan especiales como la última propuesta de Supertramped Co., quien hace unos meses nos sorprendió con un trabajo único sobre la base de un Mercedes-Benz T2 609D.
Bautizada como Rumi, la última autocaravana del especialista toma como base un Ford Transit para desarrollar una de las casas rodantes más entrañables que hemos visto hasta la fecha, pues su interior nos recuerda a una granja de los años 20, con múltiples acabados en madera allí donde miremos.
Si bien el exterior no nos permite hacernos una idea real de lo que se esconde de puertas para adentro, éste es realmente especial, contando con un vinilado que simula un paisaje con árboles y montañas. En la parte posterior vemos un árbol con pájaros, al tiempo que sobre el techo se alza una chimenea.
Ya en el interior, los azulejos pintados le dan el toque definitivo al habitáculo, combinándose con unos amplios ventanales y un equipamiento de primera que sigue la temática retro. La cocina incluye todo lo necesario para preparar una buena cena, contando con un grifo de latón para el fregadero, tres quemadores y un pequeño horno.
En el baño no falta incluso una pequeña ducha para refrescarse.
Cuando cae la noche, basta con colocar un panel entre el área de asientos para obtener la cama. Los ocupantes pueden ver el cielo estrellado a través del tragaluz del techo, que mide un metro de ancho por un metro y medio de largo, durmiendo plácidamente mientras escuchan música relajante a través del sistema de sonido envolvente.