Cuando compramos un vehículo de segunda mano nunca estamos a salvo de posibles timos por parte del vendedor. Es por ello que siempre debemos revisar con lupa el vehículo que vamos a adquirir y seguir algunos consejos para que no nos den gato por liebre, algo que le ocurrió a nuestro protagonista de hoy al adquirir nada menos que un Lamborghini Gallardo por 85.000 dólares.
Está claro que a poca gente se le ocurriría comprar un vehículo de segunda mano sin verlo primero en persona, y más si hablamos de un deportivo de altas prestaciones como el modelo italiano. Sin embargo, aún quedan algunas personas confiadas en el mundo de las que, por desgracia, algún individuo se aprovecha, y tal fue la sorpresa Nick Rienzo al recibir su Gallardo que incluso grabó un vídeo contando su historia y mostrando todos los desperfectos del modelo.
Concretamente, este Lamborghini de 2006 estaba a la venta en el concesionario Select Motors of Tampa, en Estados Unidos, cuando el señor Rienzo -residente en California- decidió comprarlo impulsivamente. Como no iba a viajar hasta Florida para verlo, el vendedor se comprometió a enviárselo tras confirmarle que el deportivo se encontraba en excelentes condiciones. Como os podéis imaginar, nuestro amigo Nick lamentará haber tomado esa decisión durante mucho tiempo…
Aparentemente puede parecer que el coche no está del todo mal, pero si nos fijamos en los detalles veremos que le falta parte de la manilla de la puerta o el interruptor de la ventana, además de tener el embellecedor del piloto posterior roto y lucir signos evidentes de haber sido repintado. Tal y como sospecha Rienzo, el Gallardo incluso podría haber sobrevivido a una inundación, por no hablar de la fuga de aceite que se deja ver en los bajos del vehículo…
Según cuenta su propietario, las sospechas comenzaron cuando el empleado del concesionario le envió un vídeo en el que salía su coche preparado para el envío. Las pinzas de freno eran verdes, mientras que las del anuncio lucían un tono dorado. Ahí comenzaron las sospechas, pero cuando Nick intentó cancelar el acuerdo no recibió respuesta por parte del vendedor. De acuerdo con la descripción del vídeo, ya hay una demanda interpuesta contra el concesionario, pero el abogado de Nick no parece obtener respuesta por parte de la concesión.
Si tenemos en cuenta que es difícil encontrar una unidad del Gallardo en buen estado por menos de 100.000 dólares al otro lado del Charco, la moraleja de la historia es sencilla: si parece demasiado bueno para ser verdad, probablemente no lo sea.
Aunque fuera barato el precio sería caro en toda regla y por todas un timo!, a parte lo que le costará después el ponerlo al día todo en regla ……
Nadie da duros a pesetas…