El Ferrari F12 Berlinetta es uno de esos coches que todos soñamos con tener en nuestro garaje, pero si además hablamos de una edición especial más exclusiva, radical y potente sobre la base de este modelo, la cosa se pone seria. Hace ya tiempo que venimos oyendo rumores de una variante más prestacional del F12 que recogiese el testigo del Ferrari 599 GTO y por fin se ha hecho realidad, demos la bienvenida al Ferrari F12 Tour de France.
Aunque su nombre pueda llevarnos al error de pensar en la famosa competición ciclista, lo cierto es que el Tour de France es una legendaria carrera de resistencia que hace tiempo que pasó a mejor vida. Aprovechando el hecho de que Ferrari fue el protagonista indiscutible de la misma durante las décadas de 1950 y 1960, ¿acaso puede haber mejor modelo que la versión radical del F12 para devolvérnosla a nuestro recuerdo?
Pues en Maranello piensan que no y el nuevo cavallino rampante verá la luz a modo de edición especial limitada a 799 unidades, con un aspecto notablemente diferenciado del modelo estándar e importantes mejoras mecánicas que afectan a su potencia, su peso y, por supuesto, su rendimiento.
En el apartado estético, el Ferrari F12 TDF parece estar sacado del mismísimo circuito, pues goza de un nuevo kit de carrocería ensanchado que incluye nuevos paragolpes delantero y trasero, un capó remozado, cambios en la cubierta trasera, una luneta posterior más inclinada, multitud de branquias y tomas de aire, un difusor trasero completamente rediseñado con cuatro salidas de escape y llantas multirradio de 20 pulgadas.
A su vez, el spoiler trasero integrado en el nuevo portón ha aumentado todas sus cotas -es 60 mm más largo y 30 mm más alto– para mejorar la carga aerodinámica del deportivo, al tiempo que las dimensiones de los neumáticos del eje delantero también incrementan su tamaño para reducir la tendencia al subviraje.
Si llegados a este punto el F12 Tour de France ya te parece la máxima expresión de lo que llamaríamos un coche extremo de carretera, espérate a saber lo que esconde bajo el capó, y es que a pesar de mantener el bloque V12 de 6.262 cc, este aumenta su potencia desde los 740 CV originales hasta los 780 CV a 8.500 rpm y 705 Nm a 6.750 rpm, con un 80% del mismo disponible desde las 2.500 vueltas. Esto supone una potencia específica de 125 CV/l y, para sacarle el máximo partido, este exclusivo modelo está equipado con una variante específica de la transmisión F1 DCT que consigue una velocidad de cambio ascendente un 30% más rápida -un 40% más veloz en el caso de las reducciones- gracias a unos engranajes un 6% más cortos.
Por otra parte, el F12 TDF reduce sus cifras en la báscula en un total de 110 kilogramos respecto a la variante convencional, lo que supone una relación peso-potencia de menos de dos kilogramos por cada caballo de vapor. Junto a las mejoras mecánicas, esto se traduce en una aceleración de 0 a 100 km/h en tan solo 2,9 segundos; mientras que para superar la barrera de los 200 km/h apenas tendremos que esperar 8 segundos y en un abrir y cerrar de ojos estaremos circulando a su velocidad máxima: 340 km/h.
Pero en Maranello no se conforman simplemente con tener uno de los coches más efectivos del planeta, los italianos se han esforzado por mejorar de manera notoria la dinámica, la agilidad, la estabilidad y el placer de conducción a altas velocidades. Por ello, esta ‘bestia’ incorpora un tren motriz completamente nuevo y aligerado, así como el innovador sistema Virtual Short Wheelbase (sistema de batalla corta virtual), el cual supone un eje trasero activo que permite a las ruedas traseras girar alrededor de un eje vertical, consiguiendo el ángulo de dirección óptimo en función del ángulo del volante, la velocidad de los movimientos del mismo y la velocidad del vehículo.
Y lógicamente, el interior de un superdeportivo tan exclusivo ha de ser acorde a las emociones fuertes que promete, por lo que en el Ferrari Styling Centre se han tomado las cosas muy en serio y el habitáculo goza de un puesto de conducción envolvente donde la protagonista es sin duda la fibra de carbono, con presencia en la consola central, el salpicadero y los paneles de las puertas.
Por otra parte, el Alcántara hace el relevo al tradicional cuero y se recurre al tejido técnico para los asientos de competición -ofrecen la posibilidad de incorporar arneses- y al modelado de aluminio en el lugar de las alfombrillas, a fin de reducir el máximo peso posible. De momento se desconoce su precio de venta, pero podéis dar por hecho que será tan descabellado como sus cifras.
Descabellado??? Y el la ferrari no cuenta para nada?
Descabellado en sentido positivo. El LaFerrari es increíble en directo, pero este promete ser incluso más salvaje!
Ricardo Francés