Las finales mundiales han ofrecido una ocasión única para mostrar por primera vez el nuevo FXX-K Evo, que estará disponible en una producción extremadamente limitada como “paquete” evolutivo para las unidades existentes.
El FXX-K Evo es una evolución importante dentro del “Programa XX” iniciado en el 2005 con vehículos específicamente concebidos para participar en el programa laboratorio de investigación y desarrollo, sinónimo de innovación y prestaciones sin parangón.
El Ferrari FXX-K Evo – al igual que sus primos, los FXX Evo y el 599XX Evo-, aprovecha un paquete que aplica los conceptos derivados de la experiencia obtenida en los circuitos dentro de todas las categorías en las cuales Ferrari compite: Formula 1, GT3, GTE y Challenge.
El FXX-K Evo, como todos los vehículos “XX”, no está homologado para su uso fuera de pista y no está en modo alguno desarrollado para su utilización en ninguna otra competición fuera del programa para el que ha sido creado. Como su antecesor, está por tanto restringido a unos pocos clientes de Ferrari seleccionados entre aquellos más apasionados por los coches superdeportivos e interesados en compartir con los técnicos de Ferrari, el desarrollo de contenidos tecnológicamente innovadores, pilotando un vehículo de laboratorio en pista.
Para el desarrollo del FXX-K Evo se ha hecho hincapié en la reducción del peso y la aerodinámica. El coeficiente de carga vertical ha sido incrementado en un 23% respecto a la versión anterior, lo que equivale a un aumento del 75% en comparación con el vehículo de calle del cual deriva. Los valores de carga llegan a 640kg a 200 km/h, y superan los 830kg con la velocidad máxima del vehículo. También se ha aumentado la dinámica en curva y el efecto suelo mediante elementos aerodinámicos.
Los niveles de prestaciones alcanzados en el vehículo han requerido un nuevo diseño de las tomas de aire en los frenos delanteros, que, pese a no incrementar la sección para no influenciar sobre la resistencia aerodinámica, mejoran su eficiencia gracias a un nuevo diseño de la toma de aire. Las suspensiones, además, disponen de una calibración específica en función de los nuevos valores de eficiencia aerodinámica.
En el interior se obtiene una impronta marcadamente de competición, se caracterizan por un volante conceptualmente diferente que bien se adapta al nivel de rendimiento siempre un punto más allá que ofrece el FXX-K Evo. Derivado del mundo de la Formula 1 con las levas de cambio integradas, el volante incluye ahora también el manettino del KERS para un mejor control del sistema y una ergonomía mejorada. Asimismo, se ha sustituido el display a la derecha del piloto para visualizar la toma de la cámara trasera por uno de mayores dimensiones, en concreto de 6,5”. Esta nueva pantalla indica los datos del nuevo sistema de telemetría, permitiendo visualizar de un modo más directo todos los parámetros relativos al rendimiento y al estado del vehículo. Mediante la selección de diversas pantallas disponibles, el piloto puede verificar el estado del sistema KERS y los tiempos en que está trabajando.