Si eres de los usuarios que estaba pensando en comprar un coche y entregar un usado con más de 10 años que apenas tiene valor, deberás saber que el Plan PIVE 8 termina el última día del mes y mientras haya un gobierno en funciones no se podrá prorrogar en el tiempo.
Mucho se habla de las ventajas y desventajas del Plan PIVE 8 pero lo que es indiscutible es que cada euro invertido en la subvención se recupera con creces, algo que permite sanear las cuentas. Sobre cómo repercute en la renta personal, difiere mucho según los casos aunque si eres de los que te libras de hacerla quizás no te interese (es cuestión de hacer números).
Lo que no tenemos muy claro es cómo reaccionarán las marcas tras el fin de las ayudas. En principio todos los vehículos que podían acogerse a la ayuda deberían ser unos 750 € más caros aunque ciertas empresas podrían mantener las promociones para no perder ventas.
En las últimas semanas firmas como Kia o Ford han realizado fuertes campañas promocionales en las que incluso sin entregar coche usado se respetaban las campañas incluido el Plan PIVE, de manera que facilitaban a cualquier usuario la compra de un vehículo nuevo a un precio asequible, casi siempre ligado a la financiación eso sí.
Todavía tenemos que esperar un poco para conocer que ocurrirá con parte del presupuesto no agotado para el Plan PIVE 8. ¿Que será lo próximo que venga? No lo sabemos pero las asociaciones del automóvil piden la eliminación del Impuesto de Matriculación y ciertas ventajas para achatarrar vehículos viejos, lo que vendría a ser algo parecido al PIVE.
Lo que está claro es que en estos años y tras ocho ediciones, el Plan PIVE ha servido para renovar 1,1 millones de vehículos que además de mejorar la eficiencia, son notablemente más seguros.
¡Maldito plam pive!
Pues venga!! Que el mercado se guie por su naturaleza y basta de achatarrar coches que pueden durar 10 años más