La gama del Ford Fiesta se completa en estos días con la introducción de una serie especial denominada «Limited Edition» que tiene como misión principal incentivar las compras gracias a una mejor relación valor-precio. No hay que olvidar que este polivalente ha perdido mucha cuota de mercado en los últimos años.
Los interesados en la nueva alternativa podrán elegir entre el motor de gasolina 1.1 Ti-VCT de 75 CV o bien la variante adaptada a GLP que deriva de ese mismo bloque. En ambos casos la caja de cambios es manual con cinco velocidades y las prestaciones resultan un poco justas para largos desplazamientos.
La dotación de serie incluida en estas versiones contempla el aire acondicionado, dirección asistida, sistema multimedia con pantalla de 8 pulgadas, Apple CarPlay, Android Auto, bluetooth, puerto USB, control y limitador de velocidad, elevalunas eléctricos delanteros y cierre centralizado con mando.
También sin coste adicional llevan el encendido automático de luces, asiento posterior abatible por partes, volante multifunción forrado en piel, alerta de cambio de carril involuntario, asistente al arranque en cuestas, ordenador de viaje, alfombrillas exclusivas y carrocería con cinco puertas.
Los precios sin descuentos son los siguientes:
- 1.1 Ti-VCT 75 CV Limited Edition 5p 17.150 €
- 1.1 Ti-VCT 75 CV GLP Limited Edition 5p 18.575 €
Ford, como todos los fabricantes, desprecia a su clientela potencial. Pierde todas las oportunidades de dominar el segmento, eliminando los TDci buenos (el 120 era una muy competitiva opción en acabados ST, Active y Vignale) con un básico de 95, y centrándose en motorizaciones de acceso rácanas. En gasolina lo mínimo REAL razonable es un 100 CV, y con ese mismo motor tienen excelentes versiones 125 y hasta el nuevo 155 del Puma