Aunque no lo parezca por su estética personal y diferenciada, el Jeep Commander comparte un gran número de elementos con el Jeep Compass que se produce en Italia. Nace para cumplir con las necesidades de esas familias que buscan un vehículo con siete plazas ahora que los MPVs han desaparecido casi por completo.
Más barato que un Grand Cherokee, el nuevo Commander no tiene nada que ver con el Grand Commander presentado para el mercado chino y que tiene una plataforma derivada de la estrenada en la última generación del Grand Cherokee. La versión para América Latina es más modesta y económica, algo necesario para terminar con precios prohibitivos.
Según ha anunciado la filial para Brasil de Jeep, el nuevo Commander aterriza inicialmente asociado a una motorización diésel de 2,o litros con 170 CV y tecnología Multijet. Incluye de serie la caja de cambios automática con nueve velocidades y el sistema de tracción total a las cuatro ruedas.
Los amantes de la gasolina podrán elegir el 1.3 Turbo GSE de 185 CV con tecnología Flex capaz de usar tanto gasolina como alcohol. Se combina con la tracción sencilla al eje delantero y con la caja de cambios automática de tipo tradicional con seis velocidades.
Según versiones los nuevos Commander pueden incluir faros Bi-LED, techo panorámico doble, tapizado en piel, asientos eléctricos y calefactables, navegador UConnect, Apple CarPlay, Android Auto, cámara 360, portón automático, siete asientos, cristales oscurecidos, alerta de cambio de carril y control de crucero.
Otros elementos disponibles son las llantas de aleación, detector de objetos en ángulo muerto, lector de señales, aviso pre-colisión, sistema de sonido de alta calidad, acceso sin llave, arranque por botón, pack LED interior, volante multifunción, detalles cromados, etc. Los precios en Brasil arrancan en los 199.900 reales, unos 32.960 € al cambio actual.