El Salón de Ginebra 2017 ha sido protagonista del lanzamiento del Audi RS 5 DTM con especificaciones 2017, un vehículo de competición que ha sido completamente rediseñado e incorpora un paquete aerodinámico claramente más agresivo, con detalles visuales que le proporcionan un parecido aún más cercano a los modelos de producción de la familia RS de Audi. Junto a él tampoco ha faltado el nuevo Audi RS 5 de producción, pues ambos han sido desarrollados conjuntamente.
La marca subraya el laborioso trabajo que significa mejorar un vehículo que ya es ganador de la DTM: ¿Rizar el rizo o simplemente continuar con lo mismo? La casa germana de los cuatro aros ha elegido la primera de ellas y ha decidido mejorar un producto que ya de por sí ha dado unos excelentes resultados introduciendo un nuevo motor y la alineación completa con la clase Super GT de Japón.
Desde las estrictas regulaciones del campeonato de turismos, que dejan poco margen de maniobra, los ingenieros se han concentrado en gran medida en el trabajo de detalle y ha sido diseñado para cumplir con los últimos cambios en las regulaciones. Además de las suspensiones, la principal prioridad de la marca ha sido rediseñar parte de la interacción de la carrocería con el aire. Así, el RS 5 DTM es más similar al modelo de calle y tiene una parrilla frontal remozada, nuevos conductos de ventilación para las tomas que refrigeran el motor y los frenos, unos neumáticos más blandos y un difusor trasero de nueva hornada, entre otros.
Por otra parte y, si bien es cierto que el alerón trasero se encuentra en la misma posición, este ahora es más plano e incorpora dos aletas para reducir la fricción de forma similar al sistema empleado en la Fórmula Uno. Además, los retrovisores exteriores se integran en el concepto aerodinámico y las formas de la carrocería entre las ruedas delanteras y traseras también revelan un nuevo concepto. Ahora, los pasos de rueda en el eje trasero son más cerrados, y la parte trasera más plana. Bajo el capó, este RS 5 de competición está impulsado por un motor V8 de 4.0 litros con una potencia superior a los 500 CV (373 kW).